El músico cubano Ramón “Mongo” Rives, Rey del Sucu suco, falleció hoy en la Isla de Pinos a la edad de 92 años, a pocas semanas de su cumpleaños, que celebraría el próximo 9 de febrero.
“Ha fallecido en su isla el Rey del sucu suco, Mongo Rives. Apenas anoche hablamos sobre él en la Uneac Pinera Isla, en el Espacio ʽÁmame como soyʼ dedicado a nuestros fundadores, y proyectamos un video clip donde lo acompañan varios miembros de nuestra organización”, refirió en su perfil de Facebook el escritor Rafael Carballosa, miembro de la organización, haciendo llegar las condolencias “a sus familiares, amigos y admiradores de su obra”.
Rives nació en 1929, en la finca La Tumbita. A su abuela, Bruna Castillo, se le acredita la invención alrededor de 1870, en el siglo XIX, del ritmo “Sucu suco”, principal aporte del territorio pinero a la música cubana, que surgió de la pasión de esta mujer por el son oriental.
A los 10 años de edad, Mongo ya tocaba el laúd criollo, su instrumento característico, debutando desde esa breve edad como músico en un quinteto que amenizaba fiestas y encuentros en su finca natal.
En 1945 funda su primer quinteto, que debuta el 25 de diciembre de ese año a golpe de Sucu suco. Desde ese momento alterna la música con el cultivo de la tierra, su principal fuente de sustento, ya que solo en 1992, tras 47 años de carrera, logra profesionalizarse y puede entonces dedicarse por completo a su música.
En 2002, Mongo Rives graba su primer disco de estudio con el sello BIS Music, acompañándose de laúd criollo, que era tocado por él, acordeón, marímbula, machete, bongó, guitarra y tres.
El término Sucu suco se aplica no solo a la música, sino al baile que la complementa y a la fiesta en sentido general que se anima con este ritmo pinero, cuya estructura formal, melódica, instrumental y armónica se asemeja a un son montuno. El vocablo proviene del sonido que provoca el arrastre de los pies con el piso al marcar el ritmo.
Entre sus temas más famosos y arraigados están “El rabito de lechón”, “Los majases no tienen cueva”, “Sucu Suco para ti para mí”, y “Yo quiero bailar con María Elena”.
A pesar de que en el panorama musical de los años cuarenta del siglo XX, el Sucu suco es superado en las preferencias por el Cha cha chá y el Mambo, no desaparece gracias a la tenacidad de Mongo Rives, quien lo mantuvo vivo hasta el presente, en que sigue siendo cultivado sobre todo por músicos pineros.
Aunque integra repertorios de otros grupos e intérpretes como Gilberto Santa Rosa, quien cantó “Sembrando para ti en tiempo de son” y lo convirtió en uno de sus grandes éxitos, los Van Van y Aldalberto Álvarez y su Son,
