En el 2016, un funcionario de la Embajada de EE.UU. en La Habana consideraba a este piloto cubano, por entonces director de la Terminal 2 del Aeropuerto Internacional de La Habana, un «contacto clave» de la embajada para coordinar temas relacionados con la aviación, la seguridad y el manejo de delegaciones VIP.
El caso de Luis Raúl González Pardo Rodríguez, un piloto cubano que estuvo involucrado en la operación aérea que resultó en el derribo de dos avionetas de Hermanos al Rescate en 1996, ha generado una fuerte controversia tras su reciente llegada a Estados Unidos bajo un parol humanitario. Este derribo, ordenado por el régimen cubano, provocó la muerte de cuatro cubanoamericanos, tres de ellos ciudadanos de EE.UU. Desde que se conoció la llegada de González Pardo a Florida en abril de 2024, las víctimas y sus familias han expresado indignación, cuestionando cómo alguien vinculado a un evento tan trágico pudo recibir refugio en el país.
En una entrevista reciente en Martí Noticias, el periodista Mario Pentón y el investigador Luis Domínguez abordaron la historia del cubano González Pardo, quien era piloto en la Defensa Antiaérea y Fuerzas Aéreas Revolucionarias de Cuba. Aunque González Pardo no fue quien disparó los misiles que derribaron las avionetas, sí formó parte del segundo grupo de pilotos que persiguió a las avionetas civiles, incluyendo a José Basulto, fundador de Hermanos al Rescate. Los aviones civiles estaban desarmados y patrullaban el Estrecho de la Florida con el fin de ayudar a los balseros cubanos que intentaban escapar del régimen.
Además de su vínculo con la operación de 1996, González Pardo fue director de la Terminal 2 del Aeropuerto Internacional de La Habana, la terminal por la que ingresan los cubanoamericanos que viajan a la isla.
Según los documentos revelados en la entrevista, espe piloto cubano ya había visitado EE.UU. en otras ocasiones con visas de turismo, antes de su reciente ingreso con parol humanitario. Estos viajes han despertado aún más sospechas sobre su verdadera relación con el gobierno cubano.
Uno de los elementos más polémicos de este caso es la revelación de un documento oficial de la Embajada de Estados Unidos en La Habana, fechado en noviembre de 2016, en el cual un funcionario consular solicita que se acelere la visa de turismo para González Pardo. El texto describe a González Pardo como un «contacto clave» de la embajada para coordinar temas relacionados con la aviación, la seguridad y el manejo de delegaciones VIP. Este documento revela que la embajada consideraba a González Pardo como una pieza fundamental en la cooperación entre los dos países, particularmente en temas de seguridad aeroportuaria y manejo de delegaciones estadounidenses en La Habana.
A pesar de este historial, la llegada de González Pardo a Estados Unidos con parol humanitario en abril de 2024 ha generado un fuerte rechazo entre las víctimas de Hermanos al Rescate.
Arnaldo Iglesias, uno de los sobrevivientes del derribo, expresó su molestia al señalar que es inaceptable que alguien vinculado a esos hechos trágicos pueda vivir en EE.UU. con impunidad. Por su parte, Silvia Iriondo, otra sobreviviente, reveló que había enviado una carta al secretario de Estado de EE.UU., Anthony Blinken, y al secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, pidiendo explicaciones sobre cómo González Pardo obtuvo el parol.
Domínguez, quien ha investigado este caso en profundidad, confirmó que González Pardo fue identificado como parte del segundo grupo de pilotos cubanos que participaron en la operación de 1996. Además, detalló que desde el 2017, su nombre había sido mencionado entre los posibles implicados en el derribo, lo que llevó a una exhaustiva investigación por parte de Domínguez y otros expertos en aviación cubana.
Este caso ha generado un intenso debate sobre las políticas migratorias de EE.UU. y el manejo de los paroles humanitarios, especialmente en el contexto de personas vinculadas a regímenes autoritarios como el cubano. Las víctimas continúan exigiendo justicia y una revisión del estatus migratorio de González Pardo, mientras se investiga más a fondo su papel en el régimen cubano y los beneficios que ha obtenido en EE.UU.
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