A lo Takeshi y Oshin. La situación del mes de noviembre en varias bodegas cubanas ha generado una ola de reacciones en redes sociales, donde los ciudadanos expresan su preocupación y frustración por la escasez y los retrasos en la entrega de productos esenciales.
En los primeros días de noviembre, se reportaron que solo se entregaron tres libras de arroz y tres de azúcar en las bodegas, lo que ha generado comentarios y publicaciones de descontento en plataformas como Facebook.
El Ministerio de Comercio Interior (MINCIN) aseguró que se están tomando medidas para mejorar la distribución y disponibilidad de productos esenciales en las bodegas, no solo para el mes de noviembre, sino para los meses venideros pero, luego de casi 65 años de promesas incumplidas, nadie les cree. Más bien se persignan.
«Estamos tocando fondo; no sé que más puede aguantar el cubano. Si de esta no se lanza para la calle…, « comentaba vía Whatsapp una amiga que, al hablar ayer con su madre, esta le contaba cómo recogió, en la bodega, una libra de arroz y una de azúcar. ¡Y nada más!
Las dificultades financieras y la limitación en las importaciones continúan siendo un obstáculo para la normalización total de las entregas de alimentos subsidiados por el gobierno cubano en las bodegas, correspondiente a los llamados «mandados» del mes de noviembre.
En las últimas semanas, en Ciego de Ávila, por ejemplo, los residentes de la provincia han enfrentado dificultades también en la entrega puntual de pan y leche en las bodegas y casillas de la provincia.
Esta situación se debe a la disminución en el volumen de acopio de leche durante esta época del año, lo cual ha retrasado las entregas y ha limitado la disponibilidad de estos productos esenciales solo para los niños entre 1 y 7 años de edad y los organismos priorizados como Salud Pública o Educación.
Municipios como Florencia, Chambas y Majagua han tenido menores afectaciones en comparación con Bolivia, Baraguá y Venezuela, pero en la capital provincial, Ciego de Ávila, donde se requiere más de 7000 litros de leche diarios para repartir, la escasez ha obligado a traerla desde Sancti Spíritus.
La situación con el pan no es diferente, pues el trigo,continúa siendo un producto importado.
En cuanto al azúcar, que si pudiera, serviría para endulzarnos la vida, ya se ha distribuido la totalidad del azúcar crudo en las 490 bodegas de la provincia, a razón de tres libras por persona, según declaró a Invasor la directora comercial del Grupo Empresarial de Comercio en Ciego de Ávila (GECCA), Dianeidys Cañizares Hernández.
Para noviembre, sin embargo, el arroz se distribuirá de forma fraccionada y gradual, con tres libras iniciales y el resto con un atraso de hasta cinco días.
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