Con actuaciones como esta, Puig no solo contribuye a la aspiración de su equipo de conquistar el título del Caribe, sino que también reafirma su posición como uno de los jugadores más talentosos y carismáticos del béisbol contemporáneo.
Durante el Preolímpico, jugado en West Palm Beach, a poco más de una hora de Miami, desertaron tres jugadores cubanos, los lanzadores Lázaro Blanco y Andy Rodríguez y el infielder César Prieto.
Las matemáticas de los cubanos ahora se dirigen hacia las posibilidades de no terminar en el sótano de ganar el intrascendente partido de despedida frente a Panamá este miércoles.
De poco sirvió la arenga que Vento le ofreció a los jugadores en el terreno como muestra la foto ni que al aterrizar haya dicho que había llegado a “su segunda patria”.