En medio de la escalada de tensiones por el posible conflicto en la frontera entre Rusia y Ucrania que involucra a Estados Unidos y las naciones miembros de la OTAN, el canciller ruso, Serguéi Lavrov, declaró este miércoles que su país reforzará la cooperación con Cuba, Venezuela y Nicaragua “en todos los ámbitos”.
«En cuanto a Cuba, Nicaragua y Venezuela, tenemos unas relaciones muy estrechas y una cooperación estratégica en todos los ámbitos: en la economía, la cultura, la educación y la cooperación técnico-militar», dijo el ministro de Exteriores ruso durante una intervención en el Parlamento.
Lavrov se refirió también a las conversaciones entre el mandatario Vladímir Putin y sus homólogos cubano, venezolano y nicaragüense, en las que acordaron “reforzar” las mucho más sus relaciones, indica un reporte de Efe.
«Durante unas recientes conversaciones telefónicas entre el presidente Putin y sus colegas de estos tres Estados amigos cercanos a nosotros, se estudiaron las formas para profundizar nuestra asociación estratégica en todas las áreas sin excepción», detalló el jefe de la diplomacia rusa.
Par de semanas atrás el vicetitular de Exteriores, Serguéi Riabkov, no descartó un eventual despliegue de armamento y efectivos del ejército ruso en Cuba y Venezuela, lo que encendió las alarmas de la comunidad internacional y los pueblos de esos países latinoamericanos.
Por su parte, Estados Unidos se tomó con calma esas declaraciones. El asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, calificó de “fanfarronada” las palabras de Riabkov, y explicó que durante las conversaciones entre Washington y Moscú respecto al conflicto en Ucrania no se habló de Cuba.
No obstante, Sullivan aclaró que su país respondería de forma “decisiva” si Rusia despliega misiles o infraestructura militar en la isla.
Hasta el momento el gobierno cubano no se ha pronunciado sobre la posibilidad de acoger bases militares rusas en el país, pese a las insistentes protestas de sus ciudadanos en redes sociales, quienes recuerdan los días de desasosiego vividos durante la llamada Crisis de Octubre, en 1962, a raíz de la instalación de misiles soviéticos en la isla.
Tras la llamada telefónica entre Díaz-Canel y Putin, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, negó que los mandatarios hablaran sobre un posible incremento de la cooperación en el ámbito militar.
