El país prevé sustituir la mitad del plantel avícola durante 2023 y 2024 para recuperar la producción de huevos.
Los factores económicos, la producción, y las crisis sanitarias como la pandemia de Covid-19, han impactado los precios del huevo en diferentes regiones del mundo y Cuba no está exenta de ese problema.
En los últimos tres años, los precios de los huevos y los cartones de huevos han mostrado variaciones notables tanto en Cuba como en otros países, y las declaraciones aparecidas ayer en el portal Cubadebate confirman que, si caro está un cartón de huevos o un huevo, pudiera encarecerse aún más, debido al siguiente hecho: la falta de financiamiento ha provocado que la producción de huevo en la isla se reduzca en un 50%.
Según explicó Jorge Luis Parapar López, presidente del Grupo Empresarial de Alimentos y Aves (Gealav) a Cubadebate, la producción de huevos en Cuba se ha desplomado en un 50% respecto a los niveles previos al 2019, debido a la escasez de piensos y materias primas para fabricarlos. Actualmente solo se producen entre 900 y 1000 toneladas diarias de pienso, cuando se necesitarían entre 1500 y 1600 para tener la totalidad de animales del programa avícola y garantizar 10-15 huevos mensuales por cubano.
La falta de financiamiento para importar maíz, soya y otros insumos se debe, según el directivo, ¡al embargo de Estados Unidos! Además, la crisis de combustible en Cuba ha provocado retrasos en la distribución del poco pienso disponible. Por ello, algunas granjas tuvieron que dar la última comida que les quedaba a las aves.
Otros factores agravan la situación. El funcionario dijo que producir un huevo le cuesta a la empresa entre 5.6 y 6 CUP, pero este sin embargo se vende a la población a 2.08 CUP, generando grandes pérdidas.
También – explicó – hubo escasez de cartones para empacar huevos y no se pudieron hacer incubaciones por falta de vacunas. Más de la mitad de las gallinas están en segundo ciclo productivo por no poder reemplazarse.
Como consecuencia, la distribución mensual por la libreta de abastecimiento bajó a solo 5 huevos por persona.
El resto – añadió – debe comprarse en el mercado informal a precios elevadísimos, inaccesibles para la mayoría de los cubanos.
El problema, con sus matices diferentes, y sin que el embargo tenga nada que ver en esta historia, se refleja de igual modo en varios países. Incluso en los propios Estados Unidos que, resulta hasta obvio señalarlo, no se le ocurriría embargarse a sí mismo.
Allí, los precios de los huevos se dispararon durante la pandemia de Covid-19, con un aumento del 153% en el precio desde el 3 de marzo, marcando el precio más alto registrado desde el brote de influenza aviar de 2015.
También hubo problemas en la India, país donde incluso muchos consumidores se vieron obligados a cambiar a una dieta vegetariana, como consecuencia de rumores difundidos sobre la implicación de las aves en la difusión del Covid-19, lo que llevó a afectar así la demanda y los precios de los huevos en el país.
Tampoco quedó exenta del problema la Unión Europea – que no es embargada por los EE.UU. – donde durante una semana particular en marzo (semana 13), el precio de 100 kilogramos de huevos en España fue de 107,95 €/docena, mientras que la media en la UE fue de 141,21 €/docena. Esto representó un aumento del 19% para España y del 11% para la UE en comparación con la misma semana del año anterior.
En Cuba, el huevo «ha evolucionado», si tenemos en cuenta que la producción de huevos disminuyó significativamente de cinco millones diarios en 2020 a 2.2 millones en 2023.
Los precios del cartón de huevos se han disparado debido a la inflación, escasez y la depreciación del peso cubano. Primeramente se reportaron a 300 CUP (a razón de 10 pesos cada huevo), para luego brincar rápidamente a 400 pesos, 850 pesos, hasta llegar al precio standard actual de 3,000 pesos por cartón.
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