Díaz-Canel, el autor de la frase «El limón es la base de todo», nos regala esta otra perla: introducir núcleos del Partido y de la UJC en las Mipyme. Si Tanya lo oyera cantaría «Ese hombre está loco»
Si eres cubano y creías que lo habías visto todo, espera, porque en Cuba siempre hay espacio para lo insólito. En un giro de tuerca que solo podría ocurrir en la isla, el presidente cubano Miguel Díaz-Canel ha propuesto la creación de Comités de Base del Partido Comunista de Cuba (PCC) y la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) ¡en las Mipyme! Sí, esas mismas pequeñas y medianas empresas privadas que, en teoría, nacieron para dinamizar una economía cada vez más asfixiada por el burocratismo y la falta de libertades económicas.
Con esta jugada maestra, parece que el Gobierno cubano no está dispuesto a perder ni un milímetro de control. Porque claro, ¿qué sería de una Mipyme sin un núcleo comunista infiltrado, listo para fiscalizar que todos los trabajadores piensen en rojo y actúen según «la única ideología correcta»?
En una reunión en Sancti Spíritus, Díaz-Canel, con su acostumbrada retórica de «todo está mal, pero nosotros tenemos la solución», anunció que no basta con las multas, la represión fiscal o las inspecciones constantes para mantener a raya a las Mipyme. No, señor. Ahora se necesita que estas empresas tengan «crecimientos adecuados y una mayor vinculación política».
Sobre las acciones para que #SanctiSpíritus continúe la marcha en el cumplimiento de las prioridades definidas para este año debatimos, junto a @DiazCanelB, con los participantes en el Pleno Extraordinario del Comité Provincial del Partido. #UnidosXCuba pic.twitter.com/6VRX8uYo4K
— Dr. Roberto Morales Ojeda (@DrRobertoMOjeda) September 13, 2024
En otras palabras, se trata de asegurar que ningún rincón de la economía escape del adoctrinamiento y la supervisión de los «chivatos» asignados, con sus libretas listas para tomar nota de cualquier desvío ideológico.
¿Será que en lugar de buscar formas reales de incentivar la productividad y el desarrollo económico, el objetivo es crear un Gran Hermano en cada oficina, taller o restaurante? Porque vamos, un comité de base en una Mipyme suena más a una forma de reforzar el control político que de resolver los problemas económicos del país.
Mientras tanto, los propios trabajadores de estas empresas, que ya enfrentan el eterno dilema de sobrevivir entre la informalidad y los escollos del sistema, deben estar rascándose la cabeza. Imagínate ser el dueño de una cafetería y que de repente tengas que lidiar con el secretario del Partido, que te exige un análisis profundo de cómo el “Marxismo-Leninismo” se aplica al arte de servir un buen café cubano.
Asiste @DiazCanelB a Pleno Extraordinario del @PartidoPCC en #SanctiSpíritusEnMarcha
— Escambray (@escambraycu) September 13, 2024
Este viernes se analizan las estrategias trazadas para corregir distorsiones y reimpulsar la economía @PresidenciaCuba @DrRobertoMOjeda @DeivyPrezMartn1 https://t.co/TgztC4kMp2 pic.twitter.com/SV0dd1RoSg
Y lo más surrealista de todo es que el propio Díaz-Canel insiste en que la «unidad y coherencia» de estas iniciativas es la clave para salir adelante. Claro, porque cuando el país enfrenta una de sus peores crisis económicas, lo primero que se te ocurre es aumentar el aparato político en todos los sectores. ¡Cómo no se nos había ocurrido antes!
Así que, si estabas esperando alguna señal de que las cosas cambiarían para mejor en el panorama económico cubano, lamento decirte que con este nuevo enfoque, parece que lo que se busca es amarrar aún más las riendas y asegurarse de que ni en las Mipyme haya espacio para la libre empresa. Y es que en Cuba, si algo está claro, es que los cambios solo vienen si los dicta la cúpula, y siempre a favor de sus intereses.
En resumen, prepárate para más sorpresas, porque en Cuba, como bien dice el dicho popular, «no te mueras pa’ que veas cosas».
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