108 inmigrantes cubanos (balseros) llegaron a los Cayos de la Florida en tan solo dos días; un número que no es precisamente un récord, pero que constituye un buen average para los tiempos actuales.
Entre el jueves en la noche y hoy viernes en la mañana se produjeron más desembarcos de balseros cubanos, confirmó el agente jefe de la patrulla Walter N. Slosar, que dirige el sector de Miami de la Patrulla Fronteriza de EE. UU.
Su actividad en la cuenta de Twitter, donde cubre eventualmente cada una de estas llegadas, al menos con una imagen de la embarcación, se activó de manera significativa y dijo que fueron doce los desembarcos, en tan solo dos días.
Slosar señaló que todos los balseros cubanos fueron arrestados, gracias al trabajo de los s agentes de la Patrulla Fronteriza bajo su mando, y de otros funcionarios encargados de hacer cumplir la ley en el estado.
El jueves fueron tres los desembarcos. Primeramente un grupo de balseros cubanos llegaron a las inmediaciones de Sombrero Beach en Marathon y luego, otro grupo llegó a Stock Island en Lower Keys. Por último, un tercer grupo fue detenido cerca de la milla 66 en Long Key.
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Es significativo que cuatro de las embarcaciones utilizadas por los inmigrantes cubanas para llegar a los Cayos de la Florida son embarcaciones de pesca. Pequeñas, pero embarcaciones al fin.
Aún y cuando no son embarcaciones rústicas, muchas de estas embarcaciones o botes de pescas no están preparados para la travesía en altamar.
La Guardia Costera de los EE.UU. a menudo insiste en este detalle como señal de advertencia a los cubanos para que no arriesguen su vida en el mar, pero la crisis económica en Cuba es tal que, aunque duela reconocerlo, cualquier cajuela con motor, o remos, o vela hecha con nylons y cosida a mano, les sirve en sus propósitos.
