JetBlue está descontinuando sus vuelos a Cuba debido a lo que considera una demanda débil, que atribuye a las restricciones de viaje de Estados Unidos a la nación insular. United también está poniendo fin a su servicio entre Newark y Cuba, aunque no ha proporcionado una razón específica para hacerlo. También Delta Air Lines ha anunciado lo mismo.
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Al «tsunami» ha sobrevivido American Airlines. Y claro, los llamados charters.
JetBlue, que actualmente presta servicios en el mercado Estados Unidos-Cuba, suspenderá sus rutas de vuelos entre Fort Lauderdale y La Habana, así como su vuelo semanal desde Nueva York JFK a La Habana, en septiembre. Southwest se hará cargo de la ruta Fort Lauderdale-La Habana, mientras que el área de Nueva York no tendrá servicio directo a Cuba como resultado de estas suspensiones.
JetBlue ha citado las actuales restricciones de viaje en Estados Unidos como la razón de la reducción de la demanda en el mercado, y ha dicho que tiene la esperanza de reanudar el servicio de los vuelos, además de explorar más oportunidades en Cuba si las condiciones de viaje mejoran.
Sin embargo, en contraste con estas afirmaciones, parecen estar las declaraciones de los los operadores turísticos, quienes durante todo el año han reportado ingresos, a la vez que destacan la creciente demanda de vuelos a Cuba, y su confianza en que estos recortes no tengan un impacto significativo en sus bolsillos.
«La segunda mitad de 2022 fue la más grande en nuestros 15 años de historia y no muestra signos de desaceleración», dijo David Lee, fundador de Cultural Cuba.
«La demanda de Cuba está creciendo», señaló para Travel Weekly.
Una preocupación latente en todo esto es si la reducción de la oferta, con una demanda estable o creciente – sobre todo para fin de año y Navidad – pueda incidir en los precios de los vuelos a Cuba. Los operadores turísticos creen que todavía habrá suficientes opciones de vuelos comerciales para atender a sus clientes, y que la disminución en la oferta de vuelos hacia Cuba, junto con una demanda constante, podría conducir al aumento de los precios de los pasajes desde EE.UU. a Cuba. Si las aerolíneas reducen sus rutas o capacidad, la competencia disminuye, lo que a menudo resulta en precios más altos.
En este escenario, con una oferta limitada y una demanda constante, es probable que las aerolíneas aumenten los precios de los pasajes para maximizar sus ingresos. Los viajeros que deseen visitar Cuba en estas condiciones pueden considerar opciones como reservar con anticipación, ser flexibles en las fechas de viaje o explorar otras rutas y aerolíneas para encontrar tarifas más económicas.
Otro servicio que se pudiera ver afectado es el de las «libras a Cuba».
Si se reduce la oferta y se mantiene o aumenta la demanda, se pudieran incrementar los costos de los servicios de envío por libras de alimentos, medicinas y otros artículos a la isla.
Las agencias de viajes y las «mulas» son actores importantes en el transporte de productos a la isla, y los cambios en sus operaciones pueden afectar los precios de estos servicios, aunque desde Cuballama, empresa tradicionalmente enfocada en el bienestar de la familia cubana, establecemos estrategias para no afectar en la medida de lo posible ni a la comunidad cubana en el exterior ni a sus familiares en la isla.
