Un grupo de madres cubanas y esposas residentes en el poblado habanero de la Güinera se reunieron para exigir justicia en los procesos penales que atraviesan sus familiares, luego de vincularse a las protestas sociales que tuvieron lugar el pasado 11 de julio en Cuba.
Hemos ido por todos los canales oficiales, hemos cumplido con todos los procedimientos, hemos hecho cartas y nadie nos ha dado respuesta”, dijo una de las participantes a través de un video publicado por el medio de prensa ADNCuba. Tanto ella como las otras seis féminas pidieron ser escuchadas por el mundo entero y sobre todo por “el presidente de este país”, Miguel Díaz-Canel.
“Pedimos por favor que nos escuchen. Nuestros familiares no pueden ser condenados a 20 ni a 25 años de privación de libertad porque no son delincuentes y para comprobarlo, las autoridades deben leer sus historiales, deben investigar”, sostuvo una de ellas que además aseguró haber crecido entre las filas del Ministerio del Interior y subrayó en varias ocasiones que ninguna de sus compañeras estaban en contra del gobierno.
“Mi casa se me está cayendo encima y aun así yo sigo siendo revolucionaria, pero exijo ser escuchada. Nosotras somos mujeres trabajadoras, con vinculación a esta sociedad”, agregó.
Según ellas, los procesos penales que pesan sobre sus familiares son completamente injustos y es por ello que deben ser tratados con respeto, “porque no son delincuentes”, reiteraron a voces.
“Sobre todo estamos aquí para abogar por los muchachos jóvenes “a quienes están condenando a muchos años de cárcel y es un verdadero abuso que todas las entidades de este gobierno estén a favor de que esos niños sufran esas situaciones”, puntualizó.
La pasada semana, el presidente del gobierno, Miguel Diaz-Canel, aseguró que en Cuba no existían prisioneros menos de edad, a propósito de las continuas campañas que en redes sociales se suman a la defensa de los presos políticos en el país, y sobre todo en favor de los jóvenes involucrados en las manifestaciones civiles, los cuales están siendo procesados en igual condición que los bandidos comunes.
En ese caso estuvieron el joven Rainel Rodríguez, de Matanzas, conocido en Twitter como @lunaticodebates; además del estudiante del Instituto Superior de Arte y residente en el municipio de Bejucal, Abel Lescay, por solo citar dos ejemplos, los cuales mostraron sus desgarradores testimonios en las redes sociales.
“No vamos a permitir seguimiento, no vamos a permitir policía ni jefes de sector en la puerta de nuestras casas, ni ningún otro tipo de acoso porque nosotras no somos contrarrevolucionarias, somos trabajadoras de este país. No pueden condenar a nuestros familiares, vamos a estar aquí hasta el final”, agregó una de las protestantes.
Hasta la Güinera ha llegado en varias ocasiones el presidente Diaz-Canel, en recorridos que los medios oficiales han maquillado como “fructíferos” y durante los cuales no se han mostrado de manera real las duras condiciones de vida que atraviesan sus habitantes, motivos por los cuales muchas de estas personas se lanzaron a las calles el 11 de julio `para clamar por sus derechos civiles de manera pacífica.
