La empresa estatal pesquera en la Isla de la Juventud ha enfrentado un inusual desafío este año: la migración de las langostas. El crustáceo parece haberle tomado el pulso a la situación actual en Cuba y decidió sumarse él también al éxodo de miles y miles de cubanos.
Según Ramón Contino, director de Tecnología de la empresa Pescaisla, no ha sido el «cruel bloque imperialista», sino el cambio climático, el factor determinante en este fenómeno migratorio de las langostas. El experto indicó que las altas temperaturas, que superan los 35 grados en las aguas locales, las mismas que contribuyen a la formación de huracanes y ciclones en el área del Caribe, son las que han impulsado, sin necesidad de VISA, a las langostas a migrar hacia aguas más profundas, alejándose de la plataforma habitual de pesca.
Este cambio en el comportamiento de las langostas ha llevado a que los niveles de captura se mantengan casi a la mitad de los índices tradicionales. Además de los desafíos climáticos, la empresa ha sufrido por la rotura de embarcaciones, lo que ha reducido aún más su capacidad de pesca.
El calentamiento de las aguas también ha sido, según declaraciones recientes, el responsable de la desaparición de los peces, según reflejara en un programa de Mesa Redonda Mydalis Naranjo Blanco, viceministra de la Industria Alimentaria. La funcionaria se hizo viral con sus declaraciones al señalar que las aguas cubanas no poseen los niveles de peces necesarios para satisfacer la demanda de pescado de la población; una declaración que generó indignación y burlas entre los cubanos en las redes sociales, que días después vieron «dónde» estaban los peces y las langostas que hay en los mercados cubanos: en mercados europeos y de Canadá.
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Uno que no ha emigrado, porque vive en tierra firme es el café, que se ha desaparecido también de las casas cubanas. En grandísima medida porque es exportado también, aunque sucesos puntuales relacionados con el trasiego de granos – entiéndase robo – pretende hacerle creer a la población que la ausencia se debe al robo.
Existen, claro excepciones, pues si bien los robos de café son en pequeñas cantidades – una mochila o un saco, cuando más – hay a quienes se le va la mano, como sucedió en las últimas horas en Villa Clara, cuando un cubano fue sorprendido transportando ilegalmente 50 sacos de café en grano en un camión estatal desde el municipio Fomento en Sancti Spíritus.
El perfil de Facebook «Fuerza del Pueblo», vinculado al Ministerio del Interior en la provincia de Villa Clara, reportó que el camión fue interceptado al intentar evadir un control policial en la autopista. El objetivo del transporte ilegal era la venta del café a 300 CUP la libra.
Este incidente se suma a otro caso reciente en Holguín, donde un individuo fue detenido por transportar 24 sacos de café en grano en un vehículo robado.
Ambos sucesos ocurren en un contexto donde Cuba enfrenta una severa escasez de café, llevando al gobierno a suspender la entrega de café en la Libreta de Abastecimiento por varios meses debido a la insuficiente producción nacional y la falta de recursos para importar.
