Fumadores cubanos en aprietos

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Actualmente en Cuba todo escasea, desde alimentos y medicamentos hasta productos básicos y bienes de consumo más o menos importantes brillan por su ausencia en el mercado estatal, lo que obliga a las personas a resolver como puedan y al precio que sea en el mercado negro. Los cigarros son unos de esos productos que, increíblemente, se han vuelto inalcanzables.  

Un reporte del periódico Granma revela que la producción de cigarrillos de las fábricas estatales de enero a junio de 2022 apenas ha alcanzado el 47% de lo planificado.

Fuentes del Grupo Empresarial Tabacuba, citadas por el medio oficial explican que el atraso “se debe, principalmente, a la falta de materiales directos utilizados en la industria cigarrera como el papel de cigarro, marquillas (caja de cigarros) y papel para envoltura (rueda o paquete de cigarro), que provocó la paralización de las fábricas en enero, marzo y mayo”.

La escasez de cigarros se empezó a sentir con fuerza en medio de la pandemia de COVID-19, cuando los brotes del virus afectaron a trabajadores de varias fábricas en todo el país y condujeron a cierres parciales de la industria.

Los cigarros comenzaron a venderse a precios astronómicos en los negocios privados y el mercado informal, mientras las colas de fumadores y revendedores en tiendas estatales se estiraron en correlación con la crisis.

Pero la falta de financiamiento es quizá el mayor problema que enfrenta la producción de cigarros en la isla, porque aunque el campo cubano garantiza la materia prima fundamental, el resto de los elementos para la fabricación de los cigarrillos como el papel de envoltura y las marquillas son de importación.

Según la fuente, “se esperaba que para el primer trimestre de 2022 el panorama pudiera cambiar. Pero estamos en agosto y la situación sigue compleja”.

En consecuencia, el precio de una caja de cigarros en el mercado negro alcanza los 200 pesos y la única solución que ofrece el gobierno es la racionalización de su venta en las bodegas donde se comercializa la canasta familiar normada.

Tabacuba informó que la fábrica de cigarros de Holguín, una de las principales del país, detendrá sus producciones hasta finales de agosto, por falta de marquillas. 

“El papel utilizado en su fabricación llegará al país en la primera quincena de agosto y debe ser procesado en las imprentas antes de arribar a la fábrica”, advirtieron directivos de esa empresa.

Por si fuera poco, la industria cigarrera también se resiente debido a la crisis energética que atraviesa la isla, que obliga a parar las maquinas todos las jornadas en el horario pico del mediodía, de 11:00 a.m. hasta la 1:00 p.m. 

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