Los familiares de los detenidos durante las protestas este sábado en Caimanera, en la provincia de Guantánamo, denunciaron la fuerte represión por parte de las tropas especiales enviadas por el gobierno para sofocar la manifestación.
Victoria Martínez Valdivia, una de las madres cuyo hijo fue detenido forzosamente, señaló que esta “ desesperada” porque su hijo se encuentra desaparecido.
“ Estoy desesperada, me lo tienen desaparecido. A mi hijo mayor, Luis Miguel Alarcón Martínez, le metieron una patada en la cabeza. No sé esta vivo o muerto. Su hermano, que tiene retraso mental, salió a ayudarlo y le dieron golpes por donde quiera. A mi hija le entraron a galletas’, dijo al sitio independiente Cubanet.
Martínez Valdivia señaló que sus hijos no hicieron nada, protestaron pacíficamente porque solo tenían para comer chícharo con gorgojo y un platano hervido.
«Ellos salieron porque no podían más”, afirmó.
Zoralia Matos Pajan explicó, por su lado, que a su hijo lo arrestaron por ir a defender a otro de los participantes y los boinas negras lo golpearon duramente y le partieron la cabeza.
Las protestas en Caimanera provocaron el corte de internet en provincias como La Habana para evitar que se extendieran como ocurrió durante el 11 de julio a partir de las manifestaciones en San Antonio de los Baños.
En Caimanera salieron los vecinos de la localidad a pedir libertad y alimentos y fueron reprimidos por las autoridades en medio del tenso clima político y social que vive Cuba, marcado por el profundo desabastecimiento de alimentos, la precariedad en la salud pública, los continuos apagones y la falta de combustible.
Las protestas ocurrieron a pocos meses de la entrada de la temporada de verano, cuando han ocurrido las mayores manifestaciones antigubernamentales en Cuba en las últimas décadas.
