La situación en la isla de Cuba es tan desesperante que cientos de cubanos continúan arriesgándose a cruzar el peligroso estrecho de la Florida, convertidos en «balseros», incluso como es el caso de una mujer, en avanzado estado de gestación.
Este martes, un grupo de migrantes ilegales que llegaron en un bote a Key Biscayne, incluía además de la embarazada, a un menor de edad.
El equipo del canal de noticias Local10 se desplazó hasta el lugar cuando justo en el momento en que tomaban declaraciones a Agentes de la Patrulla Fronteriza de EE. UU., recibieron una llamada. Alguien había visto otro bote, este cerca de Boot Key, frente a Cayo Marathon.
De inmediato los agentes se desplazaron en un bote hacia el lugar. En la embarcación los acompañó un reportero.
Luego de varias horas de búsqueda, junto a oficiales de Pesca y Vida Silvestre de Florida, y con un helicóptero de la Guardia Nacional sobrevolando el área, no se encontró rastros de los migrantes hasta que otro buen samaritano llamó y dijo haber visto a un grupo de migrantes frente a una casa destartalada.
Cuando llegaron a ellos, el reportero de Local10 encontró un cubano que le dijo exactamente el sentir de muchos de ellos, o de muchos en la isla:
“Es mejor morir en el mar que vivir en Cuba”.
Los hombres de Cuba dijeron que estuvieron en el mar durante siete días y que tuvieron que usar remos para remar después de que el motor dejó de funcionar.
La crisis que empuja a los balseros cubanos a decidir entre la vida y la muerte
Un sentimiento similar debió embargar a los 25 balseros – migrantes – cubanos que llegaron a Key Biscayne esta mañana. Un sentimiento similar debió embargar a la mujer embarazada, quien fue trasladada a un hospital local para ser sometida a una evaluación médica.
La policía de Miami-Dade dijo que estaban ubicados en Crandon Park, y presuntamente llegaron a EE.UU. en un bote rápido. Local10 informó que el grupo está bajo custodia federal y se espera que sea repatriado a Cuba.
Las cifras de migrantes – balseros – detenidos desde octubre del 2021 hablan a las claras de una crisis que solo ha tenido un precedente previo en el año 2016. En 9 meses, 3.067 cubanos han sido interceptados por la Guardia Costera de EE. UU. Esta cifra es más que todos los inmigrantes cubanos interceptados por la Guardia Costera entre 2017 y 2021.
Desde el comienzo de este año fiscal, los agentes de la Aduana y la Patrulla Fronteriza de EE. UU. han detenido a más de 1800 migrantes en el sur de Florida, un aumento de casi el 470 % con respecto al año pasado. La mayoría de los migrantes son cubanos.
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