Embajada de EE.UU. en La Habana reanudará emisión de visas suspendidas, en complejo momento diplomático

Havana
lluvia ligera
26.2 ° C
26.2 °
25.9 °
100 %
0.5kmh
20 %
Vie
30 °
Sáb
30 °
Dom
30 °
Lun
30 °
Mar
27 °

Según señaló hace apenas unos minutos el diario Miami Herald, la Embajada de EE.UU. en La Habana comenzará a emitir visas suspendidas desde la era de Trump. Un «movimiento» interesante, si tenemos en cuenta que la relación entre la administración Biden y La Habana, no vive su mejor momento.

«A partir del lunes, la Embajada de EE.UU. en La Habana ampliará sus servicios de visas para facilitar los intercambios culturales y educativos entre los dos países,» señala la periodista Nora Gámez citando a un funcionario del Departamento de Estado que ofreció declaraciones al medio.

«La Embajada de EE.UU. también procesará visas para atletas, artistas, miembros de grupos religiosos, aquellos con “habilidades extraordinarias” y empleados que sean transferidos a otras posiciones de la empresa en Estados Unidos,» añade el Herald y precisa que, «anteriormente, los cubanos tenían que solicitar este tipo de visas en terceros países», pues «la administración de Trump suspendió los servicios de visas en Cuba en 2017, citando incidentes relacionados con el síndrome de La Habana y la necesidad de reducir su personal al mínimo.»

La «movida» llega justo en un momento que un periodista de AP, en artículo amplificado en Político, califica como «punto muerto» en «la ampliación de relaciones» entre Estados Unidos y Cuba.

El prestigioso medio señala como una de las preocupaciones de la administración Biden, y aspecto este por el cual no se ha avanzado, es que «Cuba necesita abordar las preocupaciones en materia de derechos humanos antes de que se puedan lograr más avances en las relaciones diplomáticas.»

La Habana, y aquellos que abogan por el mejoramiento de las relaciones, pudieran creer que, tras la salida del principal escollo en el Partido Demócrata para el mejoramiento de las relaciones entre los dos países, el influyente senador Bob Menéndez, las cosas entre ambos países mejorarían al extremo de ser felices y comer perdices.

Si bien el hecho aún es reciente y no hay modo de exigir mejoras, por un lado tenemos a un presidente saliente, y a unas elecciones cada vez más cercas.

Hace apenas unas horas, encuestan daban a conocer de un repunte de Kamala Harris frente a Donald Trump en un condado perdido para los demócratas: Miami-Dade.

Ello implica que, tomar una medida favorable a La Habana puede significar un retroceso.

Esta última, sin embargo, insiste y ha insistido en que es Washington quien no quiere acercarse a La Habana, mientras que AP recuerda las palabras de un «alto funcionario de la administración, a quien se le concedió el anonimato para hablar libremente sobre la política estadounidense», quien declaró sobre la «amplia brecha entre Washington y La Habana».

«No hemos visto voluntad por parte del gobierno cubano de hacer un gesto más grande que resulte en un deshielo significativo en las relaciones».

Lo cierto es que si La Habana esperaba que la muerte política de Bob Menéndez le vendría de perilla a sus intenciones, hizo un mal cálculo. Viejo y cada vez más cansado de tanto ajetreo, Biden continúa siendo un férreo defensor de la libertad y los derechos humanos.

TAL VEZ QUIERAS LEER: Bob Menéndez y Joe Biden conversarían sobre la postura de EEUU con relación a Cuba

Y si esto no fuera todo, apareció para males – del régimen cubano – la alianza entre Marco Rubio y Rick Scott.

El pasado 12 de agosto, es decir, hace apenas 48 horas, y casi que como «celebración» del cumpleaños del dictador Fidel Castro, Rubio y Scott firmaron una declaración conjunta en la que afirman que «el ilegítimo régimen cubano ha hecho de Cuba un refugio seguro para la China comunista, Rusia, Irán y Venezuela.»

Esta declaración hace más ruido que los grillos y expande más ondas que los microondas del pasado, y plantea una verdad de perogrullo: esa amenaza está a apenas 90 millas de las costas de Estados Unidos, lo cual afecta » a nuestros intereses de seguridad nacional y a la estabilidad de nuestra región.» Estados Unidos debe seguir defendiendo la democracia y los derechos del pueblo cubano.

“El mundo es testigo de las múltiples formas en que el régimen de Castro/Díaz-Canel ha servido como títere de la China comunista, Irán y, más recientemente, Rusia. Estados Unidos tiene el deber moral de defender los intereses de nuestra nación y debemos continuar defendiendo el orden democrático y la justicia en nuestro hemisferio”, dijo el Senador Rubio haciendo tal vez alusión directa a las denuncias sobre la presencia de barcos de guerra rusos en la región, y a la ampliación de las bases militares de espionaje chinas en la isla.

“El ilegítimo régimen comunista cubano es una fuerza desestabilizadora en el hemisferio occidental, un puerto seguro para los terroristas, un amigo de los enemigos de Estados Unidos, un opresor del pueblo cubano y un violador de los derechos humanos,»agregaba Rubio en su declaratoria.

Por su parte, el senador Scott, ex gobernador de la Florida, insistía en que «Estados Unidos debe adoptar una postura».

«Estoy orgulloso de unirme a mis colegas en esta resolución para dejar claro que NO toleraremos los abusos contra los derechos humanos del ilegítimo régimen comunista cubano y utilizaremos toda la fuerza de nuestro gobierno para exigirles responsabilidades. Estoy junto al valiente pueblo cubano y nunca olvidaré su lucha”, declaró.

Visto así, al parecer no existen ni existirán «las bases para que en el segundo mandato puedan alinearse» Washington y La Habana.

Rubio hizo ya la denuncia en el pasado más reciente, declarando que la administración demócrata intenta acercarse a La Habana, «que está desesperada por cualquier señal de un salvavidas».

La elección de Tim Waltz como compañero de fórmula presidencial por Harris, puede ser esa señal.

Tim Walz, quien actualmente es el candidato a la vicepresidencia de los Estados Unidos junto a Kamala Harris, ha mostrado un enfoque pragmático y equilibrado respecto a las relaciones con Cuba.

Aunque no ha tomado nunca una postura radical, su enfoque sigue la línea general de la administración de Biden, que busca reactivar y ampliar el compromiso diplomático y económico con la isla, luego de las políticas más restrictivas implementadas durante la era de Trump.

POLITICO y WOLA señalan que Walz ha apoyado iniciativas que buscan eliminar barreras para el intercambio cultural y educativo entre Estados Unidos y Cuba, y ha mostrado interés en facilitar el apoyo al sector privado cubano, así como en asegurar una migración segura y ordenada.

Además, Walz es partidario de revisar y posiblemente revertir algunas de las políticas más restrictivas impuestas a Cuba, incluyendo la eliminación de la isla de la lista de Estados Patrocinadores del Terrorismo, lo que podría facilitar una mayor cooperación y diálogo entre ambos países​

En todo caso, habrá que esperar por ver la batalla que se avecina. O no, si es que sale nuevamente Donald Trump presidente.

¿Quieres reportar algo?

Envía tu información a: [email protected]

Lo más leído

Quizás te interese

Envíos a CUBA desde → $1.79 x LBENVÍA AQUÍ
+