Pasada la hoja del Campeonato Mundial, la selección masculina de voleibol debe proponerse ahora cerrar el ciclo con su reaparición en el torneo olímpico a propósito de los Juegos de París 2024 luego de su ausencia en Tokio 2020.
“Los quiero mi piquete, el año que viene vamos duros”, escribió la estrella del equipo, Robertlandy Simón, en sus redes como despedida a esta temporada junto a la nueva generación de voleibolistas cubanos que dejaron una impresión esperanzadora en el grupo de Eslovenia.
Por lo pronto mejoraron el lugar 18 del pasado Mundial y obligaron a Italia a perder su primer set en el certamen.
Los italianos, actuales campeones de Europa, no reservaron elogios para los cubanos quienes en casi la mitad de sus regulares actúan en la Liga Italiana encabezados por Simón, convertido para muchos en el mejor central del mundo .
Precisamente bajo la conducción del técnico de la “azurri”, De Giorgi, el cubano ganó el “scudetto” y la Champions League en el Civitanova. El gigante caribeño, de 2.08 metros, se muda ahora para el Piacenza.
Desde Ljubliana el partido fue visto por 1,2 millones de espectadores italianos de acuerdo a estadísticas desde Roma. Se pudiera especular que desde la Isla la cifra de cubanos podría ser similar, mismos que vieron y confirmaron que Cuba estaba obligada a cumplir con la menor cantidad de errores en el Mundial si quería vencer a su verdugo tradicional que también atraviesa una renovación importante:12 debutantes.
A pesar de la derrota, Cuba dominó a Italia en remates (52 a 39) pero cedió en el duelo de bloqueos, 5-12 Los 44 errores de los caribeños frente a los 28 de Italia fueron, sin embargo, la principal diferencia entre los dos equipos.
Los europeos supieron aprovechar bien ese exagerado número de pifias. Al final, la organización y la paciencia de Italia vencieron a una Cuba de músculo y potencia .
Un 3-1 (25-21, 21-25, 26-24, 25-18) que asciende a los “blues” de De Giorgi a los cuartos de final del Mundial de Eslovenia y Polonia y los devuelve al partido del miércoles, otra vez en Ljubljana, con el ganador del campeón olímpico Francia vs Japón.
Cuba retornará la próxima temporada a la Liga de Naciones, la ex Liga Mundial, además de compromisos con los Juegos Centroamericanos y del Caribe en San Salvador en junio (donde seguramente enviará un segundo plantel) y los Juegos Panamericanos de Santiago cinco meses después donde ya en Lima 19 logró medalla de plata pero que en esta nueva ocasión podría agenciarse el oro.
El reto de los cubanos también estará en que consigan cumplir los compromisos con la selección nacional con la misma eficiencia que con sus contratos profesionales, un dilema que podría también estar afectando a otros deportes colectivos e individuales en los momentos cumbres.
