La COVID-19 definitivamente no podrá paralizar eternamente la economía de los países en el planeta. Llegado a este punto de tan alta transmisibilidad del virus, definitivamente impulsado por la reticencia de millones de personas, como el tenista Novak Djokovic, a vacunarse, y al acaparamiento de las vacunas por parte de los países más ricos – evitando que estas lleguen al pobre continente africano de donde surgió Ómicron – lo que parece ser que nos queda es prepararnos. Sobre todo si vamos a salir a la calle, por que tendremos que hacerlo.
Y si vamos a viajar. Sobre todo en avión.
Los expertos están de acuerdo en una sentencia: ‘Un avión lleno de extraños, donde los niveles de inmunidad varían de altos a inexistentes y no siempre se cumple con el uso de máscaras adecuadas, sin mencionar a las personas posiblemente infectadas con COVID-19, es un juego de ruleta’.
Pero, ¿cómo salir «ilesos» de esa especie de ruleta rusa? Lo primero es estar advertidos. Estar conscientes de que «en el trayecto» podemos pescar el virus. Incluso «a la llegada». Al menos así parece haberle sucedido a esta persona que les escribe que encontró un domingo, en el Aeropuerto Internacional de Miami, un cambio de turno, con 4 aviones llegando simultáneamente y un caos en Inmigración.
Estos son los factores claves que pueden incidir en su viaje que Ud. debe tener en cuenta.
Todo viaje en avión actualmente genera preocupaciones de salud y seguridad. ¿Cómo tomar las mejores decisiones? ¿Cómo evitar en la mayoría de nuestras posibilidades, el contagio con la COVID?
Lo primero es saber que las situaciones, en su entorno, se escapan en ocasiones de su responsabilidad. Por más que nos cuidemos, un aeropuerto es un lugar cerrado. Un avión es un espacio más reducido aún. Y en ambos, hay personas a su alrededor. Personas que tal vez no tengan la precaución que tiene Ud. Y Ud. no puede decidir en las acciones de ellos. Al menos no el 100 % de las veces.
Lo primero es no caer en una situación de stress. Conviene estar relajados pero alertas. Así podremos tomar las mejores decisiones en cada caso.
- Estar vacunados contra la COVID. Este es un elemento FUNDAMENTAL. Las vacunas desempeñan un papel principal en la mitigación de la tasa de infección y la gravedad de la enfermedad. Los expertos advierten que estar vacunados no impedirá que contraigas el virus pero, es una barrera de defensa contra la COVID. No es la primera barrer, pues este honor le corresponde a las mascarillas, pero es sin dudas la más fuerte defensa.
- Conseguirse una buena mascarilla. Usarla doble, si es preciso.
- Sentarse en un lugar aislado.
- Lavarse las manos con frecuencia. No tocar «objetos» por tocarlos. Ya que los aeropuertos comparten espacios comunes y superficies de alto contacto, como botones de ascensores, rieles, manijas de puertas de baños, mostradores, bandejas para colocar objetos en el scaner de equipaje, tenga presente que, cada vez que toque algo, deberá desinfectarse las manos.
Sí, los aeropuertos son un desafío. Muchas personas están a su alrededor. Algunos tosen repentinamente. O estornudan. Y por ahí se cuela la COVID.
Aunque todos deberán usar la mascarilla en todo momento, tenga presente que en el momento que toman agua o comen, se la quitan para hacerlo. Eso puede suceder en cualquier restaurante de una terminal aérea, pero donde es más peligroso es dentro del avión, pues la circulación del aire está limitada.
Eso sí, tenga en cuenta que la mayoría de los aviones cuentan con filtros para la circulación y desinfección de virus como el SARS-Cov-2, causante de la COVID, pero, no es efectivo 100%. No si Ud. viaja en un avión lleno y a su lado, a escasos centímetros suyos hay dos personas. Una a su izquierda y otra a su derecha.
«La calidad del aire en el avión es un cóctel formado por el aire sin filtrar de la cabina de pasajeros, el aire fresco que se introduce desde el exterior durante el vuelo y el aire filtrado que sale del sistema de filtración del avión. En un momento dado, estás respirando una mezcla de estos tres componentes. Por lo tanto, la salud de los demás pasajeros afecta directamente a la calidad del aire en el avión, así como a su salud,» indica una web utilizada como referencia para este trabajo.
Tenga en cuenta que no todos los pasajeros dentro del avión usarán la mascarilla correcta. Algunos la usan incorrectamente. Otros se la quitan en determinado momento. Otros hasta intentarán usar una tanga.
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«Algunas personas usarán máscaras de alto rendimiento, mientras que otras usarán máscaras con un rendimiento de filtración deficiente o reciclarán una máscara desechable que debería haberse tirado y reemplazado hace horas o días antes. Los extraños se quitarán las máscaras para comer y beber en el avión, mientras que es posible que otros no las usen correctamente,» indica la página de referencia.
Que los demás usen una mascarilla deficiente es algo que escapa de sus manos. Ud. no puede elegir una mascarilla por ellos, pero Ud. sí que puede elegir la suya.
Sí, viajar actualmente exige responsabilidad. Exige escoger bien las decisiones.
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