Raffaella Carrá habría cumplido este domingo 80 años. La cantante, compositora y bailarina, una de las artistas más icónicas del pasado siglo, ha sido recordada y celebrada por legiones de admiradores y la prensa Europa y de otras partes del mundo donde su explosiva carrera causó furor.
En Cuba La Carrá hizo época. Es muy difícil que cualquiera mayor de 60 años no recuerde a la diva que también fue un símbolo sexual en la isla.
La italiana fue una artista transgresora y rebelde que escandalizó a medio mundo y cautivó a figuras como Maradona, de quien se dijo mantuvo un romance con la famosa italiana, que durante su trayectoria también provocó que el Vaticano se llevara las manos a la cabeza, porque consideró que sus actuaciones eran “demasiado provocadoras”.
Con su cabellera rubia y su mirada hipnótica la cantante, nacida el 18 de junio en Bolonia, cambió la evolución del pop y la música popular en Italia con una carrera memorable llena de éxitos y canciones como Fiesta, Lucas, Caliente, caliente, entre muchos más.
Llamada por algunos como “ la Mujer de la libertad”, sus canciones se escucharon por generaciones de cubanos que se sentían identificados con sus ritmos contagiosos y la singular seducción y el magnetismo que desprendía la artista, cuyos temas hoy todavía se escuchan por millones en las plataformas de la música.
La cantante, que se presentó en los principales escenarios del mundo y marcó la historia de varios programas de televisión, mantuvo su figura esbelta y su belleza hasta la fecha de su muerte a los 78 años víctima de cáncer en medio de la pandemia de Covid-19. Tanto que en Italia se hizo habitual la frase de “nada es eterno, excepto Raffaella Carrá».
