Una cubana que reside en La Habana asegura que puede sacar las liendres y los piojos de una cabeza en apenas una hora.
Así promueve su negocio en redes sociales Liuba Martínez quien “en tan solo 60 minutos” “te deja” la “cabecita” “sin liendras ni bichitos insoportables”.
A tenor con un post compartido en el grupo de Facebook ‘Madres cubanas por un mundo mejor’, Luiba vive en La Virgen del Camino, en el capitalino municipio de San Miguel del Padrón.
“Solo escríbeme al Whatsapp y agenda tu cita”, recomienda esta mujer que hace “años” se dedica a ayudar “a esas mamis que no tienen el tiempo suficiente” para “limpiarle” la cabeza a sus hijos.
“No lo pienses más y escríbeme al WhatsApp 53453190”, insiste Luiba, que ya está dando “los turnos de agosto”.
Luiba, que al parecer tiene bastante demanda, recuerda que sigue y seguirá siendo “tu solución”, al menos hasta que le llegue el parole (humanitario), según bromeó.
“60 MINUTOS y adiós liendras y piojos”, dice en otra de sus promociones esta cubana que garantiza “una súper limpieza en una sola sesión”.
Vale destacar que, la escabiosis y la pediculosis, llamadas también sarna y piojos, respectivamentre, constituyen un problema de salud pública en Cuba.
A finales de 2022, expertos sanitarios explicaron a Radio Martí que la falta de medicamentos para la eliminación de estas infestaciones y la poca higiene que existe en algunos hogares y escuelas, contribuyen a que aumente el número de casos.
“No hay jabón, no hay detergente y lo que hay está a un precio tan altísimo que son pocos los que pueden acceder a eso al menos que tengan remesas”, dijo entonces al citado medio el doctor Ramón Zamora, quien se refirió a la falta de productos de aseo en la oriental provincia de Holguín.
Recientemente, la especialista en Pediatría, Gelsy Reyes, precisó al periódico Sierra Maestra, de Santiago de Cuba, que cuando hay casos de pediculosis, “no hay que alarmarse ni iniciar tratamientos de forma indiscriminada”, sino revisar para buscar las liendres o huevos, “al menos una vez por semana”.
