En una serie de sucesos delictivos recientes, dos ciudadanos cubanos se encuentran enfrentando cargos legales en diferentes países. En España, un enfermero cubano está siendo juzgado por presunto maltrato a ancianos en Alicante, mientras que en Hialeah, Estados Unidos, otro individuo enfrenta acusaciones por el robo a un banco armado.
En el caso de España, un enfermero está siendo sometido a juicio en Alicante por acusaciones de maltrato a ancianos, según señala EPE.
Al cubano se le imputa haber cometido diversos actos de abuso físico y psicológico contra los residentes de un centro de cuidados para personas mayores.
El acusado presuntamente aprovechaba su posición como enfermero para infligir daño y sufrimiento a los pacientes a su cargo. El caso ha generado gran indignación y se espera que la justicia determine la culpabilidad o inocencia del acusado.
En el otro extremo, en la ciudad de Hialeah, Estados Unidos, un hombre ha sido sentenciado por cometer un robo armado en un banco, dijo el Departamento de Justicia.
Ariel Valero, un cubano residente en Hialeah de 45 años de edad, fue enviado a prisión por la jueza principal del Tribunal de Distrito de los EE. UU., Cecilia M. Altonaga. La jueza sentenció al cubano a más de 11 años en una prisión federal, seguidos de cinco años de libertad supervisada por robo a un banco y blandir un arma de fuego durante un delito.
El hecho ocurrió el 26 de diciembre de 2019.
Ese dia, el cubano ingresó a un banco Wells Fargo, ubicado en Miramar, condado de Broward, Florida, cubierto de pies a cabeza con un mono negro y pasamontañas. Al ingresar al banco, Valero blandió un arma de fuego negra, saltó sobre el mostrador de los cajeros, amenazó a los cajeros y robó una enorme cantidad de dinero.
Valero huyó de la escena en una bicicleta, que luego abandonó y que fue incautada por la policía. Un examen forense realizado posteriormente en el asiento de la bicicleta reveló la presencia del ADN de Valero.
Tras el incidente, la policía identificó al sospechoso en un vehículo mientras se dirigía hacia el norte por la avenida Palmetto. Finalmente, el FBI asumió la responsabilidad de la investigación y logró capturar al sospechoso en el condado de Miami-Dade.
Las autoridades no revelaron en un primer momento información relativa a la cantidad de dinero robada, pero medios de la Florida que cubrieron la noticia señalaron que el monto de lo robado ascendía a $300 mil dólares.
En el informe del DOJ emitido ayer se aclara que la cifra robada era de $30,959.99 en efectivo.
Si bien el hecho provocó consternación entre los empleados del banco y tráfico detenido durante al menos dos horas en Hialeah, no se reportaron heridos durante el asalto.
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