Como Acosta, muchos padres cubanos enfrentan una batalla similar, luchando por visas humanitarias que permitan a sus hijos recibir atención médica en el extranjero debido a la falta de recursos y medicamentos en Cuba.
A la pequeña, que lleva meses luchando por su vida, le fue otorgada una visa que le permitirá acceder a un procedimiento que en Cuba no ha podido realizarse ante la falta de recursos económicos y humanos.