El último programa dedicado a demonizar a elTOQUE encaja en un guion ya conocido, pero cada vez más burdo. La académica y activista Hilda Landrove lo resume como una especie de confesión de impotencia, “solo que en la forma en que los criminales confiesan su impotencia, atacando”.
Tras más de diez días del suceso las autoridades no han revelado la identidad del conductor detenido, mientras en otros hechos de violencia acaecidos durante los últimos tiempos el MININT publica informaciones detalles con prontitud.
Más allá de las cifras y las sanciones, el programa insistió en algo que resuena con fuerza: el daño a la confianza pública. “La ley del presupuesto tiene fuerza de ley. Y lo que está en juego es el dinero del pueblo, no un fondo privado que se puede mover por capricho”, dijo el conductor Humberto López en su monólogo final. La vergüenza pública, advirtió, tiene un rol disuasivo que debe jugarse con cordura, pero sin concesiones.
La supuesta actuación inmediata de los órganos de Justicia en el país a la que aludió Humberto López en su perorata oficialista, quedó desmentida por la madre de una menor de edad abusada sexualmente cuando a continuación expresó:
El vocero oficialista Humberto López tildó “sutilmente” de ingrata a la joven cubana Mailén Díaz, luego que la sobreviviente de la tragedia aérea de...
La activista opositora cubana Yeilis Torres Cruz fue declarada libre de todo cargo penal y multada con 3000.00 pesos cubanos, luego que permaneciera 10...
Eloy Viera Cañive todavía espera porque Humberto López acepte la invitación que él le hizo a debatir sobre Derechos en Cuba.
Eloy Viera Cañive respondió...
Para un periodista está prohibido pretender ser (o hacerse) gracioso con un hecho que no contiene ni la más mínima pizca de humor. No puede satirizarse una imagen que por controversial puede resultar hiriente, una imagen que define y caracteriza el estado de un país.
El presentador de la televisión nacional Humberto López se equivocó en su directa de Facebook y grabó a tres agentes policiales mientras hacían su guardia especial en la popular Esquina de Toyo, en Centro Habana. En su intento por mostrar la aparente tranquilidad que reinó este 15 de noviembre en las calles de la ciudad, el enviado especial del sistema informativo de la Televisión Cubana olvidó identificarse primero y terminó siendo asediado en medio de la directa por los agentes.