La situación actual refleja la complejidad de las relaciones diplomáticas y comerciales en el continente, donde las decisiones de una potencia como Estados Unidos pueden tener repercusiones profundas en las economías y políticas de sus vecinos. Tanto Colombia como México se encuentran navegando en aguas turbulentas, buscando equilibrar la defensa de su soberanía con la necesidad de mantener relaciones comerciales estables con su principal socio económico.
Esta acción sigue a una serie de pasos menores tomados por la administración Biden en semanas recientes destinados a desalentar la migración y acelerar el procesamiento de solicitudes de asilo.
Se trata de una visita que confirma la importancia central de la inmigración en la carrera presidencial de 2024, donde podrían volver a enfrentarse el presidente y el exmandatario.