Sandro Castro fue sorprendido por el lente paparazzi mientras sacaba de una casa en La Habana, varias botellas de Tequila Xicote para ser llevadas, presuntamente, al bar que regenta él en la capital del país.
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Según se conoce el suceso ocurrió el pasado 3 de enero de 2022. La casa, según una fuente es uno de los «almacenes» que utiliza Sandro Castro en La Habana para «esconder» su mercancía.
La fuente indica que este lugar es nuevo, y presuntamente comenzó a ser utilizado tras el explote que hubo con su apartamento, que utilizaba como «almacén» y que está ubicado en la 3ra planta del edificio 739, sito en Calle 32 y Ave. Kohly, en Plaza de la Revolución, y que según el medio Cubanos por el Mundo tenía varias cajas de bebida dentro cuando fue «visitado» por la policía en marzo del 2020.
Sin embargo, tras el pequeño problemita que tuvo con la policía, Sandro se vio obligado a mover la mercancía de allí e incluso removió «por unos días», de su auto, la pegatina con la imagen de su abuelo – Fidel Castro – del parabrisas trasero del carro, a fin de no ser identificado en la calle. Un Kía Picanto cuya chapa es P 208 195.
Nadie conoce cómo Sandro pudo hacerse de este auto, pero es de presumir «quién» se lo regaló.
Sin embargo, fue identificado. Y fotografiado.
Es el mismo auto que aparece en las fotos, ahora, parqueado frente a una casa en La Habana.
La casa posee el número 7012. Tras varias llamadas la fuente supo que la vivienda está ubicada en la Calle 43, entre 70 y 72 en el municipio de Marianao. Está registrada a nombre de ELSA MARÍA MONTANO PÉREZ. La madre de Sandro Castro, Rebeca, posee apellido Montano.
Elsa María tiene un hijo, Alvaro Castro, que según sus redes sociales vive en Hialeah, Florida.
Se desconoce hasta el momento la relación que pueda existir entre Sandro y Álvaro; o si esta relación «viene» por el apellido Castro o el apellido Montano.
El periodista Juan Juan Almeida afirma estar casi convencido que el Álvaro Castro residente en Hialeah, no tiene nada que ver con Sandro. Afirma que «ningún Castro», ni siquiera los herederos de Ramón Castro, el hermano mayor de Fidel y Raúl, tiene casa en Marianao. En Nuevo Vedado y en Miramar sí, pero no en Marianao. Mucho menos estudiar en escuelas de Marianao.
Sandro Castro vive una vida «compleja». «Vigilado» por sus excentricidades; mientras el pueblo cubano vive una vida más compleja aún, sin excentricidades y sin poder darse el lujo de comprar una botella de tequila XICOTE
