Un adolescente permanece ingresado en estado grave y otros cinco están fuera de peligro tras recibir el impacto de un rayo, cuando regresaban de un partido de fútbol una localidad del municipio Santa Cruz del Sur, en la provincia de Camagüey.
«Cuando íbamos de camino al caserío sentí un corrientazo fuerte que me hizo apoyar la rodilla en el suelo. Por unos segundos estuve aturdido y con la vista en blanco. No sabía qué pasaba», declaró Roberto Roca, de 23 años, uno de los jóvenes afectados por la descarga eléctrica del rayo.
De acuerdo con un reporte de Cibercuba, el ocurrió el martes pasado, cuando una tormenta hizo que los muchachos suspendieran el juego de fútbol y decidieran regresar a sus casas.
Según relató Roca al medio independiente, luego de recuperar el conocimiento, vió que tres de sus amigos permanecían tirados en el suelo y sangraban por sus bocas, lo que describió como “una pesadilla”.
Otro de los miembros del grupo que salió ileso de la descarga, le pidió que le ayudara a echar tierra sobre los cuerpos de sus compañeros y en ese momento Roca se dió cuenta de que su cuñado Diover Cardoso permanecía inconsciente.
«Lo llamaba y no respondía y al ver que los otros dos ya se recuperaban y Diover seguía sin dar señales de vida, me puse muy nervioso y pedí ayuda. Incluso, alguien dijo que estaba muerto, así que imagínate cómo me puse, porque solo tiene 17 años», relató el joven camagüeyano.
Los muchachos pidieron ayuda y fueron trasladados de inmediato en un auto hasta el hospital, donde el personal médico logró sacar del paro a Cardoso, que permanece en estado grave, pero estable.
«El miércoles lo operaron de urgencia en una zona cerca al corazón», explicó Roca, y aseguró que «gracias a Dios”, todo salió bien.
En Cuba mueren anualmente entre 60 y 70 personas producto de impactos de rayos, aunque estudios internacionales reflejan que el 90% de los sujetos afectados por descargas eléctricas logra sobrevivir.
