Ante la grave crisis de desabastecimiento de combustible, el gobierno de La Habana determinó limitar la venta de carburantes por vehículo en los servicentros donde se abastecen todos los consumidores.
De acuerdo con la medida, en el caso del diésel, la venta por cada auto se limitará a un máximo de hasta 100 litros, mientras que los choferes de vehículos a base de gasolina sólo podrán adquirir hasta 40 litros del combustible.
Imágenes de extensas colas de coches y motos se volvieron virales en las últimas semanas en redes sociales, al tiempo que empeoraba la situación del transporte en toda la isla a causa de la escasez de carburante.
Pero no fue hasta el pasado viernes que el presidente cubano, Miguel Díaz Canel, reconoció el agudo déficit de combustible que provocó el repunte de los apagones y amenaza con detener gran parte de la actividad productiva en el país.
“Estamos con coberturas de menos de 400 toneladas de gasolina para todas las actividades del país, de manera diaria, y sin todavía tener bien claro cómo vamos a lograr los empates para salir de esta situación”, admitió el mandatario durante una visita a la provincia de Villa Clara.
Díaz-Canel explicó que el actual desabastecimiento “no tiene que ver con ineficiencias” de su gobierno, sino a incumplimientos de los países que suministran combustible a la isla.
Por su parte, el Ministro de Energía y Minas cubano, Vicente de la O Levy, declaró a la televisión estatal que la disminución de los volúmenes de combustible tiene diversas causas, pero la fundamental es el “impacto del bloqueo económico”, de Estados Unidos.
Para evitar llegar al mínimo de las capacidades y mantener servicios vitales para la población y la economía, se adoptó la decisión de distribuir cantidades disminuidas en comparación con el consumo normal diario del país.
“Se priorizan ambulancias, servicios necrológicos, la cosecha de la papa y se va a mantener un nivel de diésel en los servicentros para la población”, advirtió el ministro.
Asimismo, aseguró que se mantendrá a la venta como “un nivel de diésel en los servicentros para la población”.
Respecto al gas licuado, detalló que en algunas provincias la cobertura es muy baja y se trata de garantizar actividades claves como la elaboración de alimentos y los hospitales.
