En un episodio que parece sacado de un cuento de hadas al revés, un turista fue asaltado en plena luz del día en la calle Aguiar de La Habana Vieja. Los ladrones, en su apresurada huida, dejaron atrás un zapato, lo que ha llevado a las redes sociales a bautizar al delincuente como «el ladrón Cenicienta» o «El Ceniciento».
Así lo hizo saber en las redes el internauta que se identifica como Edmundo Dantés Jr.
En su publicación – a la que no le ha faltado nada, desde solidaridad con las víctimas y condenas al hecho, como poca solidaridad por haber viajado a Cuba – se denuncia que, a pesar de que las víctimas intentaron contactar a la Policía Nacional Revolucionaria (PNR), los agentes nunca llegaron al lugar, lo que obligó a los turistas a retirarse antes de recibir asistencia.
El incidente ha generado como es obvio en estos casos, una ola de comentarios sarcásticos en redes sociales, donde los usuarios se preguntan si la policía cubana está más interesada en reprimir opiniones políticas, encerrar en sus casas a activistas y opositores, que en proteger a los visitantes.
El caso generó además memes y burlas, como fue la aparición de un post en Facebook escrito por el presunto ladrón, quien sin decir que era el ladrón, pedía que le devolviesen el zapato que perdió durante una caminata por «cayes tranquilas» de La Habana Vieja y – agregaba – lo necesitaba para ir a marchar a la plaza el próximo 1ro de Mayo. ¡Poco le faltó para decir que la caminata la hizo para apreciar los logros de la Revolución!
¿Y a qué no saben de quién era el rostro del presunto ladrón? Pues del otro ladrón que, días atrás, se robó un iPhone, y se supo quién era gracias a una función de seguridad del propio dispositivo, pues este al detectar intentos fallidos de desbloqueo, activó su cámara frontal y tomó una foto del intruso sin que este se diera cuenta. ¿Recuerdan ese caso?
También hubo quien se preguntó si, tal como en el cuento original de «Cenicienta», las fuerzas del orden efectuarían una batida por los barrios, zapato en mano, para identificar a su dueño.
Memes y burlas aparte, este no es un caso aislado. Recientemente, en Santiago de Cuba, una turista fue asaltada por un joven que le arrebató su teléfono. El ladrón fue interceptado por un grupo de jóvenes y detenido hasta la llegada de la policía.
Según el Observatorio Cubano de Auditoría Ciudadana, en 2024 se reportaron 1.317 delitos en Cuba, incluyendo 880 robos y 93 asaltos, lo que representa un aumento del 50,72% respecto al año anterior; un hecho que ha afectado negativamente al turismo en Cuba.
En 2024, el número de visitantes cayó por debajo de las cifras del año anterior, con solo 2,2 millones de turistas registrados. Aunque no puede achacarse esta disminución exclusivamente a la violencia e inseguridad desatadas, resulta obvio que en medio de toda crisis, como la que atraviesa la isla, los crímenes y delitos se exacerban, y ello lo conocen los turistas extranjeros que tienen en mente visitar el país caribeño. A pesar de estos desafíos, el gobierno cubano continúa priorizando inversiones en la industria del turismo, destinando recursos significativos a la construcción de hoteles y otras infraestructuras turísticas .
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