Una red que traficaba a migrantes cubanos hacia España fue desarticulada por una operación internacional realizada por agentes de la policía española, de Serbia y Grecia junto a la Interpol.
Los traficantes llevaban a los cubanos a realizar la ruta vía Serbia, y luego hacia Grecia para llegar finalmente a España.
“La red criminal utilizaba una conocida aplicación de mensajería para dar publicidad a sus servicios; cobraban en torno a 9.000 euros a los traficados por el viaje, traslados y la documentación falsa facilitada”, señaló el periódico La Razón.
El diario apuntó que “durante la investigación se han detenido a 62 personas en diferentes estados miembros, de los cuales 25 eran nacionales cubanos usando documentación falsa y 37 pertenecían a la organización criminal”.
Del grupo de detenidos 37 fueron capturados en varias ciudades de España, 8 en Serbia y 8 en Grecia.
El proceso investigativo comenzó cuando fueron identificados grupos de cubanos con documentos falsos que intentaban cruzar la frontera para ingresar a Europa, quienes entablaban contacto con traficantes a través de aplicaciones de mensajería en Internet.
Los criminales se aprovechaban de la situación de vulnerabilidad e incertidumbre de los cubanos que aspiraban llegar a España.
“La red criminal trasladaba a los migrantes de Cuba a Serbia, ya que en este país no les exigían visado hasta hace un mes. Una vez allí, una parte de la organización gestionaba cartas de invitación para simular su entrada legal y les proporcionaban alojamiento cercano a la frontera con Macedonia del Norte. Desde la frontera comenzaban el desplazamiento en grandes grupos hasta Grecia. Había varias rutas para llegar a Grecia: de Macedonia del Norte a Grecia y de ahí a España o bien de Serbia a Bosnia y Herzegovina-Croacia-Eslovenia-Italia-España”, explicó La Razón.
La red de migrantes cubanos tenía tentáculos en varios países de Europa. Al trasladar a los migrantes de la isla hacia la ruta de Eslovenia-Italia establecían alianzas que les ayudaban a cruzar.
En el trayecto los grupos de cubanos, en los que estaban menores de edad, sufrían robos, estafas, abusos y otras vejaciones.
El desmembramiento de esta red de migrantes cubanos ocurre cuando los cubanos han acudido a diversas vías, incluso algunas en las que han dejado la vida, para escapar de la crisis económica que vive la isla, una situación que ha tocado fondo según los últimos datos que el gobierno se ha visto obligado a revelar.
Los traficantes de personas se aprovechan de la desesperación de los migrantes cubanos para obtener suculentas ganancias económicas y ofrecer vías de migración que a veces se convierten en una estafa y un grave peligro para sus vidas.
Hasta el momento el gobierno cubano no ha ofrecido una solución a la crisis ni a la estampida migratoria que vive el país.
