El gobierno cubano fijó un nuevo precio minorista para la comercialización “regulada” de la papa a 11 pesos la libra, lo que representa un incremento del 120% respecto al valor establecido desde febrero pasado.
La Resolución 5/2023 del Ministerio de Agricultura, en vigor a partir de su publicación este miércoles en la Gaceta Oficial, establece además los precios de acopio del tubérculo en dependencia del tipo de semilla que se utilice en su producción.
En el caso de la papa cosechada a partir de semilla “multiplicada nacionalmente”, la norma fija el precio de acopio en el campo en 19 mil 261 pesos con 64 centavos la tonelada, lo que equivale a 886 pesos el quintal, mientras que la obtenida con semilla importada tendrá un costo de 15 mil 174 pesos con 52 centavos la tonelada (698 pesos el quintal).
Asimismo, la resolución estipula que el margen para la comercialización mayorista de ese tubérculo, establecido por la Resolución 467 de la Ministra de Finanzas y Precios en diciembre de 2020, “se comparte entre las partes de mutuo acuerdo, según las funciones que le corresponden”.
En febrero de 2022 se fijó el precio minorista para la comercialización papas frescas en Cuba a cinco pesos la libra, y a seis en el caso de la que se vendía fuera de temporada y por tanto debía ser conservada en frigoríficos.
El estado raciona la distribución de ese alimento cada vez más escaso por la libreta a precios subsidiados, pero las pocas libras per capita que vende al mes no alcanzan para tres comidas por lo que la mayoría de los consumidores se ven obligados a adquirir el mismo producto 10 veces más caro en el mercado negro.
La inflación es uno de los principales problemas que sufren los cubanos desde la implementación de la llamada Tarea Ordenamiento en enero de 2021 y en el caso de los alimentos el asunto es mucho más preocupante.
Apenas dos años después de la reforma económica el precio de la papa distribuida por la libreta de racionamiento ha subido 1.000%.
