Ian tenía este lunes también a 12 mil personas sin electricidad en Carolina del Norte
Cuando aún se realizan acciones de rescate de personas en diferentes ciudades del estado, autoridades de la Florida informaron este lunes que la cifra de fallecidos como consecuencia del paso del huracán Ian por la Florida ascendió a más de 70 personas. Específicamente a 76 personas en Florida, según dijo CNN el domingo. A estos hay que sumar otros cuatro ciudadanos que murieron por tormentas asociadas a Ian en Carolina del Norte, por lo que la cifra total de muertos en EE.UU. es de 80, sin contar las víctimas encontradas este lunes.
El huracán Ian tocó tierra en Florida el 28 de septiembre de 2022 por la costa suroeste, con categoría 4 en la Escala Saffir-Simpson, con vientos de 250 km/h, arrasando varias islas como Sanibel Island, y localidades como Cape Coral y Fort Myers. También la ciudad de Naples recibió severos daños producto de las inundaciones y la fuerza de los vientos.
Grandes inundaciones, devastación de viviendas, carreteras y líneas eléctricas caídas, es el panorama que dejó como sello de su paso por la Florida el huracán Ian.
Todavía quedan más de 600 mil personas sin servicio eléctrico, reportó el portal PowerOutage.us, y en Carolina del Norte el número de personas que no tienen electricidad ascendió a 12 mil. La red eléctrica de la región podría tardar semanas en recuperarse completamente.
Aunque todavía no se han calculado con exactitud los daños y la cifra de hasta $47 mil millones en pérdidas aseguradas es un dato que se maneja de modo preliminar, Ian podría ser ya el huracán más costoso en la historia del estado sureño, dejando atrás a Maria y al «histórico» Andrew, del año 1992.
El número de rescatados ascendió a más de 1,070 personas; la inmensa mayoría – por no decir todos -fueron rescatados en las áreas inundadas en el suroeste y el centro del estado, donde el nivel del agua alcanzó en algunos lugares hasta 18 pies.
Varios de los rescatistas y rescatados han estado ofreciendo testimonios de su vivencia durante y despúes de la tormenta. Los rescatados han concluido que fue «riesgoso» quedarse, y otros lamentan la decisión de permanecer en sus hogares, considerando así que no valió la pena arriesgarse por «proteger» cuatros cosas que finalmente se perdieron, o se dañaron para siempre.
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