El hispano, residente en Miami, enfrenta ahora un cargo de hacer un informe falso o amenaza de bomba contra el gobierno o propiedad pública.
Un sujeto ha sido puesto bajo custodia, luego de haber sido arrestado por ejecutar una falsa amenaza de bomba en la oficina del defensor público de Miami-Dade.
Mateo Sanjurjo, residente en Miami, hizo la llamada aproximadamente a las 10:30 a.m. del pasado viernes, y en ellas dijo que había cuatro bombas en la oficina del defensor público Carlos Martínez, de Miami-Dade, ubicada en 1320 NW 14th St.
Sanjurjo enfrenta ahora un cargo de hacer un informe falso o amenaza de bomba contra el gobierno o propiedad pública.
Su accionar se repitió una y otra vez, dijo el Departamento de Policía de Miami-Dade.
Según este, Sanjurjo, un hispano de 21 años de edad, luego de la primera llamada amenazante, llamó a la oficina del defensor público por segunda vez diciendo: “Yo soy el que tiene la bomba” y luego colgó el teléfono.
Así lo confirmó la policía de Miami-Dade, que aunque acusó al sujeto por llamar para hacer una falsa amenaza de bomba, no llamó una ni dos veces, sino más.
Una tercera llamada fue hecha poco antes de las 11 a.m. Esta vez, Sanjurjo llamó y dijo:
“Quiero jugar un juego”. Luego de esas palabras, volvió a colgar el teléfono.
Habría incluso una cuarta ocasión, dijo la policía. En todas las llamadas, este hispano se identificó proporcionando su número de cárcel personal: 210145763.
Luego de proceder a la evacuación de todo el personal del edificio donde se encuentra la oficina del defensor público y registrar todo el área con un escuadrón antibombas, la policía determinó que no había una amenaza real de bomba.
Por «la (mala) broma telefónica» este hispano fue detenido en el Centro de Detención Previa al Juicio del Condado de Miami-Dade a la 1:10 p.m. que tendrá lugar este viernes.
Las amenazas falsas ejecutadas sea a través de las redes sociales o del teléfono, mediante un audio o video, son consideradas delitos y conllevan años de cárcel. En el pasado, la policía ha arrestado hasta menores de edad, casi niños, que han proferido amenazas en su escuela con palabras como «mi padre tiene un arma en la casa, la voy a traer a la escuela y los voy a matar a todos».
Tal vez el último de esos casos fue el de un niño de apenas 11 años de edad que fue arrestado el pasado mes de mayo en el condado de Lee, en Florida, por hacer una amenaza escrita de tiroteo en su escuela. El estudiante de quinto grado de la escuela primaria Patriot, en Cape Coral, envió un mensaje de texto en el que amenazaba con una masacre en la institución y por tal motivo resultó arrestado.
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