El receptor cubano Oscar Valdés se reencontró con su padre en Miami, ciudad estadounidense a la que llegó mediante un proceso de reunificación familiar.
Valdés, para sus allegados Oscarito, jugó 10 Series Nacionales con el emblemático equipo de Industriales y en la temporada 2018-2019 fue refuerzo del de Sancti Spíritus.
Según reveló el reportero Francys Romero en su cuenta de Facebook, Valdés buscará seguir jugando en alguna Liga Independiente de Estados Unidos o circuitos como México.
Integró el equipo Cuba a torneos como los Juegos Panamericanos de 2019 y otros de segundo nivel en los últimos años.
En palabras del también reportero Yasel Porto, en la isla Valdés se desarrolló como pelotero hasta lograr un rendimiento por el que mereció tener “mejor suerte alguna que otra vez”.
“A su defensa detrás del home plate sumó un bateo bien oportuno, que lo convirtió en uno de los bateadores más peligrosos en el equipo habanero”, recordó.
Además, Porto destacó a Oscarito como un jugador “muy popular” porque su carácter “súper especial” lo hizo “uno de los mejores compañeros de equipo” y de los que “lograron tener mejor vínculo con los fanáticos y los periodistas”.
“La intención de Oscarito es mantenerse en el béisbol profesional, con opciones en ligas independientes de Estados Unidos y el Caribe”, confirmó Porto.
Valdés vistió además el uniforme de Portuarios en la I Liga Élite del Béisbol Cubano y en la segunda edición continúo con el de Industriales.
El máscara capitalino debutó en los campeonatos cubanos en 2012. En más de una década acumuló un promedio de bateo de 282, 32 jonrones, 11 triples y 99 dobles.
En el último campeonato doméstico fue vital en el bateo de Los Azules, ya que anotó 46 carreras, y dio 79 hits, 11 vuelacercas, 12 dobles y un triple.
“No soy un jonronero, pero cuando le pego a la bola camina para todas las bandas”, declaró al medio oficialista Radio Rebelde.
En diciembre del 2016, tras pasar más de un año en República Dominicana, donde intentó firmar con alguna organización de Grandes Ligas, pero solo consiguió jugar en la Liga de Verano con el Bonao, Valdés regresó a Cuba.
Con Frank Camilo Morejón y Lázaro Ponce, quienes eran los titulares en aquella etapa, lesionados, ganó protagonismo en el equipo capitalino.“Me ha costado un poco encontrar ritmo debido a la falta de juego que tenía. Estuve mucho tiempo entrenando, pero sin jugar y poco a poco he ido levantando”, reconoció a CiberCuba entonces.