El gobierno de Estados Unidos anunció varias medidas para facilitar el acceso de un mayor número de inmigrantes a la aplicación CBP One, de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, que permite solicitar citas para pedir asilo en la frontera del país norteamericano.
Las autoridades estadounidenses explicaron que los nuevos cambios tienen como objetivo ampliar la cantidad de citas disponibles cada día, además de permitir a los usuarios completar sus solicitudes en un período de 24 horas.
Asimismo, el Departamento de Defensa indicó dar prioridad a los inmigrantes que llevan más tiempo a la espera de citas para solicitar asilo en la frontera.
A través de una directa en su Canal en Youtube, el periodista cubanoamericano Mario J. Pentón valoró que los cambios son positivos, debido a que resuelven muchas quejas de cientos de cubanos que permanecen varados en México y que han tenido serias dificultades para acceder a la aplicación CBP One.
Los cambios forman parte de los preparativos del gobierno estadounidense para la cancelación del Título 42 el próximo 11 de mayo, cuando se espera la llegada de una avalancha de inmigrantes de Centroamérica convencidos de que les permitirán ingresar a Estados Unidos.
Algunos críticos de la política migratoria del presidente Joe Biden han advertido que el panorama de la frontera sur podría ser caótica a partir de esa fecha.
El senador republicano Lindsey Graham aseguró que Estados Unidos “está bajo amenaza”, y que en los próximos noventa días se verán entre 900.000 y un millón de migrantes cruzando la frontera.
No obstante, la administración del presidente demócrata aclaró que tras el fin del polémico Título 42 continuará prohibido el paso de inmigrantes irregulares.
A finales de abril el gobierno de EE.UU. informó que los migrantes que no recurran a la vía legal serán expulsados en cuestión de días y no podrán volver a entrar al país por al menos cinco años, ni solicitar asilo político, salvo algunas excepciones.
Adicionalmente, la Casa Blanca decidió enviar 1,500 soldados para reforzar a los 2,500 que ya patrullan los tramos fronterizos más conflictivos, especialmente en California, Arizona y Texas.
