La búsqueda del taxista camagüeyano Guperto Rafael Canovas Adan, lanzada por sus familiares en redes sociales, culminó con un final trágico: el desaparecido fue encontrado, pero sin vida. Su muerte se suma a las reportadas en los últimos días en diversas regiones de Cuba, con el robo como presunto móvil criminal.
“Lamentablemente, Guperto Rafael Canovas Adan, quien estaba desaparecido desde este viernes, fue encontrado muerto. Hoy el pueblo camagüeyano llora otra víctima más de esta ola de violencia que no tiene fin. En Paz Descanses. Basta ya!!! Ni uno más!!!”, escribió en su muro de Facebook el periodisata José Luis Tan.
La desaparición de Guperto fue denunciada por sus familiares: el taxista había salido a una carrera con tres clientes (dos hombres y una mujer), y nunca regresó.
“Según familiares, él no acostumbra a salir de la provincia sin avisarle a su esposa. Además, lo llaman al móvil y este se encuentra apagado o fuera del área de cobertura”, alertó Tan, quien siguió el caso desde un inicio.
La noticia fue seguida por una avalancha de comentarios de tristeza, pesar e indignación. Algunos incluso afirmaron que en Cuba hacía falta un presidente como el salvadoreño Nayib Bukele, quien ha reducido a las “maras” (pandillas) de su país con un régimen de excepción y mano dura.
“¿Hasta cuándo?” “Así anda la continuidad, como el cangrejo” “Qué salvajismo hay en este país”, son algunos de los comentarios que acompañaron la confirmación del crimen. Camagüey, por demás, ha sido escenario en los últimos días de varios crímenes de alto perfil, primero el asesinato del conductor de un triciclo eléctrico, y luego el feminicidio de una joven de 17 años, víctima de su expareja, un hombre que casi le triplicaba la edad, y que la persiguió y mató en plena estación de la policía local.
Con anterioridad, un hombre fue asesinado en La Habana para robarle el vehículo, y otro en Matanzas fue asaltado, golpeado y dado por muerto, pero sobrevivió y pudo dar las pistas para capturar a los asesinos, que días atrás habían matado a un empresario cubanoamericano, y lanzado su cadáver a una laguna en Jagüey Grande.
Mientras, el Ministerio del Interior dedica sus redes sociales a promover las candidaturas locales para las elecciones de diputados a la Asamblea Nacional, celebrar el aniversario de la Aduana General de la República, y reportar sobre los migrantes devueltos por otros países. Del clima de violencia imperante, y las acciones para garantizar la seguridad ciudadana, ni media palabra…
