La muerte de un anciano que llevaba varios días haciendo cola en una tienda del barrio habanero de Luyanó destapó una red de corrupción en la que están implicados desde la gerente del establecimiento hasta los miembros de la brigada de Lucha Contra Coleros (LCC).
De acuerdo con un reporte de 14ymedio, horas después de que retiraran el cuerpo del anciano identificado como Arístides, comenzó un operativo de la policía y autoridades locales que detectó la retención de mercancías por parte de los trabajadores del establecimiento, ubicada en calle Melones entre Enna y Guasabacoa.
«Tuvo que morir una persona para que vinieran a investigar. Ese señor llevaba días en cola sin poder comprar, porque ahí lo que tienen es un descaro», declaró al medio independiente una asidua cliente de la tienda sobre el deceso del anciano.
Según la información divulgada por el gobierno del municipio 10 de Octubre, durante la pesquisa encontraron 11 paquetes de pollo con sus respectivos comprobantes de pago en la nevera, además de seis paquetes de picadillo y 11 pomos de shampú Sedal que se encontraban retenidos.
“En la oficina de la Gerente de dicha tienda se detectan en una gaveta 3 pomos de Shampú y 3 pomos de Acondicionador valorados en 160.00 pesos cada uno, 3 ruedas de cigarros H.Upman y 1190.00 CUP, además de un faltante de 6129.00 pesos correspondiente a la venta realizada el día 31 de octubre de 2022”, precisa una nota del gobierno local, publicada en Facebook, y añade que los productos confiscados fueron vendidos a 5 personas, entre ellos una madre con un niño menor de un año.
Asimismo, explica que durante la investigación, los dependientes del establecimiento dijeron que los paquetes de pollo pertenecían a los LCC, lo que provocó varios comentarios y denuncias en contra de dichas brigadas creadas por el gobierno precisamente para luchar contra la corrupción en las tiendas.
“Para mi son un problema. Agravaron la corrupción y le dieron más problemas al pueblo. Al final qué sentido tienen si las personas tienen que ir con la libreta”, señaló una internauta, y pidió que visiten la tienda de Espadero.
“Son muy desagradables. Maltratan a la población. Acabado de llegar el pollo te dicen que solo llegó para 20 personas. En tu cara ven las motos ir y venir llevándose pollo. Por eso mantienen la cola a una cuadra. Si ya no hay COVID qué sentido tiene? Es para alejar la vista de la población”, denunció.
“Eso lo da la escasez, la corrupción y el lucro. Es una mafia entre los trabajadores, los LCC y los revendedores tienen dominadas todas las tiendas para su beneficio personal, mientras los trabajadores que aportamos a la sociedad nunca podemos comprar en las tiendas, y nada decomisan, cambian el personal y a los 3 días es igual o peor”, comentó otra usuaria de la red social.
