Un cubano compró un cucurucho de maní en la calle por el valor de 5 pesos cubanos – 5 CUP – y al contar los granos de maní que tenía dentro el cucurucho descubrió que apenas eran 18. Unas matemáticas sencillas le llevaron a hacer un gran descubrimiento: cada grano de maní cuesta 27,7 centavos de pesos cubanos.
Identificado como Ariel Alfonso, el internauta recibió numerosos comentarios de apoyo y asombro, entre ellos el de un colega nombrado Angel Yunier, quien alega que cada cucurucho de maní «debe tener» entre 12 y 15 granos.
«Si tiene 15, haz una fiesta,» le dijo.
Considerado por muchos cubanos como un alimento barato y de alto valor energético, el cucurucho de maní ha sido salvavidas de no pocos unirversitarios cubanos que, junto a la barra de maní – ya sea en granos o molido – encontraron en él, el alimento «ideal» para sortear la crisis alimenticia en los años de escuela primaria, secundaria, preuniversitaria y universitaria.
Luis A. Abrahantes, cienfueguero, sobrevivió «a la crisis», dice, gracias al maní.
«Un pan con croqueta por dos pesos, una tableta de maní – en granos o molido – y un refresco, eran mi alimento por la noche, antes de dormir, para no ir con la barriga vacía a la cama,» dice Luis Alberto vía telefónica.
«Nada alimenta más y te daba proteína que el maní. Aunque las tabletas las mezclaban con granos de frijoles. Por eso lo mejor y lo más nutritivo era el cucurucho de maní; daba energías y te sostenía el hambre, que era lo que más había por esa época en Cuba.
Nayvis Estévez, colaboradora nuestra, vendía maní – en tabletas o en cucurucho – antes de descubrir que, con retazos y recortería de piel y alambres de cobre, podía hacer pulsitas, collares, aretes.
«El cucurucho de maní se vende rápido. A todos les gusta. Es un negocio redondo para cualquiera; pero los cucuruchos de maní ahora no tienen nada que ver con los de antes. Incluso en Miami puedes encontrarte quien los vende, en los semáforos. Por $1 dólar no creas que te dan mucho más que 18 granos,» afirma con la experiencia que le da haber sido vendedora de maní en su Pedagógico, en los años 90´.
Lo cierto es que, pagar 5 CUP por un cucurucho de maní que antes se vendía «a peseta» y que luego pasó «a peso», y descubrir que dentro tiene solo 18 granos, parece una estafa pero…
«No hay mayor estafa que en los agromercados,» dice Sandra.
«Pero no voy a agobiarte con eso, que ya de eso hemos hablado; pero si te parece extraño un cucurucho de maní a $5 pesos, ¿qué me dices de una libra de cebolla a cien CUP. O de tres tomates a 120 CUP,» pregunta inquieta desde La Habana, con la experiencia que tiene de haber vivido todo el 2020 y el 2021, agobiada por la pandemia de la COVID-19, entre colas de tiendas, la mayoría en MLC, y los agromercados.
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