Desde que los terroristas somalíes de Al-Shabaab anunciaron justo hace una semana la muerte, aún por confirmar oficialmente, de los dos médicos cubanos que ellos secuestraron, sus millones de compatriotas dentro y fuera de la Isla están consternados mientras esperan las respuestas de las autoridades a las interrogantes abiertas con esta tragedia.
El Gobierno de Cuba está investigando, el de Kenia está investigando, el de Somalia está investigando, el de Estados Unidos está investigando. Pero la primera pregunta que todos se hacen es si el enviado especial de Miguel Diaz-Canel, el presidente del Parlamento , Esteban Lazo, podrá acceder a los presuntos cadáveres de los jóvenes galenos Assel Herrera y Landy Rodríguez
¿Cómo podría hacerlo? En mayo de 2019 ancianos de ambos lados de la frontera kenyana y somalí, en función de intermediarios, confirmaron que los dos cubanos se encontraban con vida en zonas de la provincia somalí de Jubalandia, controladas por Al-Shabbab, y que estos bandidos exigian el pago equivalente a millón y medio de dólares para su liberación.
Como se sabe el Gobierno de Kenia se negó a pagar el rescate mientras públicamente se registraba el silencio oficial cubano sobre esa postura
No se descarta que nuevamente se solicite la ayuda de los viejos líderes tribales para intentar una comunicación con los terroristas y que muestren y entreguen los restos de los dos doctores. Los de Al-Shabbab querrán garantias . Y no se sabe si seguiran queriendo dinero además de no ser apresados en esta operación. Pero ellos son los verdaderos culpables de estas muertes al margen de que en su comunicado aseguren que los cubanos fueron muertos por drones en un bombardeo estadounidense . El Comando Africa de Estados Unidos reconoce que ese ataque aéreo ocurrió.
Hay numerosas aristas en el «esclarecimiento y cooperación» para confirmar la veracidad de los decesos de Herrera y Rodríguez que contempla la agenda de Lazo. Incluso el preguntar por qué los dos cubanos estaban en una casa, posible punto visible para la anunciada ofensiva de Estados Unidos y de las fuerzas somalies.
Se desconoce si entre los ingentes esfuerzos que han reiterado las autoridades cubanas hicieron en casi cinco años de cautiverio, hubo alguna comunicación con Estados Unidos para advertir de la presencia de los dos médicos cubanos en zonas de Al-Shabaab.
El mensaje del gobierno de La Habana de los esfuerzos por traer sanos y salvos a la patria a Assel Herrera y Landy Rodriguez ya no podrá concretarse. Lo que está claro es que fueron ubicados originalmente en una ciudad muy peligroso como Mandera, muy porosa a los ataques de los yihadistas.
Por momentos incluso se llegó a pensar que ambos podrian correr la misma suerte de la trabajadora social italiana Silvana Romano secuestrada por estos mismos bandidos en noviembre de 2018 -cinco meses antes que los cubanos- en Kenia y llevada a Somalia y liberada en mayo de 2020 gracias a los servicios secretos italianos y a la mediación de Turquía. Al parecer hubo pago de un rescate, pero no está confirmado.
En el comunicado de Al-Shabbab de hace una semana sobre la presunta muerte de los médicos aparece también la supuesta fotografía de uno de los doctores cubanos fallecidos, un hecho que despertó también dudas al no presentarse la de los dos cuerpos sin vida.
