Cuba, Venezuela y Nicaragua no son bienvenidas en la venidera Cumbre de las Américas que se celebrará en la ciudad de Los Ángeles entre el 6 y el 10 de junio venideros, según confirmó el subsecretario de Estado para Asuntos Hemisféricos de los Estados Unidos, Brian Nichols, confirmando así la postura de esta nación manifestada en enero pasado cuando se anunció que a este evento solo asistirían los líderes continentales “elegidos democráticamente”.
Los tres gobiernos latinoamericanos “no van a recibir invitaciones” según declaró el funcionario durante una entrevista en el canal NTN24, donde aseveró que “Cuba, Nicaragua y el régimen de Maduro no respetan la carta democrática de las Américas y por lo tanto no espero su presencia” dado que el presente “es un momento clave en nuestro hemisferio, en que estamos enfrentando muchos retos a la democracia”, a la vez que negó la posibilidad de una reunión bilateral entre Washington y Caracas.
En días previos el senador republicano Rick Scott solicitó expresamente al presidente Joe Biden que excluyera a Cuba de la Cumbre de las Américas y prohibiera directamente la participación de Miguel Díaz-Canel, argumentando en su cuenta de Twitter que “el ilegítimo régimen comunista cubano no tiene derecho a asistir a la Cumbre de las Américas. Por eso le envié una carta a POTUS (Biden) instándolo a prohibir a Díaz-Canel y sus matones”.
Ante las declaraciones cubanas emitidas por Bruno Rodríguez Parrilla, Canciller de Cuba, acerca de la “presión extrema” que estaba ejerciendo Estados Unidos sobre los gobiernos de América Latina y el Caribe para excluir a Cuba del evento continental, Scott expresó que esos “malvados dictadores pueden llorar todo lo que quieran” pues su nación nunca dejará “de luchar por la democracia y para terminar con su gobierno”.
Rodríguez Parrilla calificó entonces de “grave revés histórico” el hecho de que el gobierno cubano fuera “marginado” de esta Cumbre, que sucede cada 4 años, y regresa a los Estados Unidos 28 años después, cuando en 1994 fuera acogida por la ciudad de Miami.
El propio Brian Nichols ya había declarado hace una semana que los representantes de Cuba, Venezuela y Nicaragua eran “improbables invitados” y que “seguramente no estarán ahí”, por lo que la ausencia de estos países era prácticamente una “jugada cantada”.
El lema “Construir un futuro sostenible, resiliente y equitativo” presidirá el evento que dedicará sus sesiones a los flujos migratorios en la región, que experimentan un incremento alarmante, la crisis climática, la transición hacia las energías limpias, el crecimiento económico equitativo y los roles de la sociedad civil y los medios de comunicación independientes en la sociedad.
