Un nuevo movimiento opositor acaba de surgir en Cuba tras las recientes protestas del pasado 17 de marzo en varias provincias de la isla. Se trata del llamado Movimiento 5L organizado por un grupo de cubanos radicados en la isla y en el exilio que presentaron el manifestó “El Contrapaquetazo del Pueblo: Las 5 Libertades Contra el Totalitarismo”.
Este proyecto señala en su manifiesto que “con el 82% de los ciudadanos luchando por adquirir lo básico para sobrevivir y el 88% sumido en la pobreza, la situación se ha vuelto insostenible. La producción de alimentos ha disminuido drásticamente, mientras que la infraestructura básica, como viviendas y suministro de agua, está en condiciones precarias. Los apagones son frecuentes y la violencia y el narcotráfico están en aumento”.
Añade que el sistema político cubano » ha privatizado la soberanía nacional y perpetuado la pobreza material y moral en la isla. Se insta a un cambio real y profundo en el sistema cubano, que incluya la liquidación del totalitarismo estatal”.
Agrega que “para lograr esto, se propone la implementación de las cinco libertades básicas (5L): la libertad del terror, la libertad económica, la libertad de expresión, la libertad de asociación y la libertad de movimiento. Estas libertades pondrían fin al bloqueo interno estatal y permitirían la transformación hacia una sociedad justa y democrática”.
De acuerdo al medio Infobae “los promotores confían en que los miles de cubanos que hasta hoy protestan sin afiliarse formalmente a alguna organización prodemocrática decidan aunar sus reclamos promoviendo exigencias comunes de amplio consenso popular para el cambio profundo y urgente en la sociedad cubana”.
Los impulsores del proyecto han indicado que lucharan de forma pacífica para obligar a la salida del poder a los gobernantes cubanos. “Se hace un llamado a todos los cubanos, civiles y militares, a unirse en esta lucha por la libertad y el cambio”.
“Es la hora de la responsabilidad cívica. De la concertación por la libertad, no de la discordia. Todos ganaremos con el cambio. Poner fin al totalitarismo es la imprescindible primera etapa en la lucha por alcanzar una sociedad democrática, con estado de derecho y libertad económica. Una sociedad en que todos quepamos. Sin los actuales monopolios políticos y económicos de un partido y su oligarquía. La Cuba con todos y para el bien de todos que nos merecemos”, explicaron sobre las bases de este nuevo movimiento.
Entre los firmantes del documento se encuentran profesores, sindicalistas, periodistas, emprendedores y activistas.
Durante las últimas décadas han surgido en Cuba diferentes iniciativas para contrarrestar la hegemonía del Partido Comunista entre ellas la más conocida fue el Proyecto Varela, fundado por el activista político cubano Oswaldo Payá en 1998, de cuya muerte en un sospechoso accidente de tránsito en el este de Cuba se responsabiliza al gobierno cubano.
