Punto Violeta es la iniciativa propuesta por el Consulado de España en La Habana para que las ciudadanas del país ibérico que sean víctimas de violencia de género cuenten con asistencia inmediata para presentar denuncias y acceder a servicios médicos, coordinar con autoridades locales y recibir ayuda de psicólogos españoles a través del número +53 528669122.
Dicho proyecto será pronto extendido a todos los consulados españoles en el mundo, para que las ciudadanas de ese país puedan acceder a los servicios implementados por las autoridades consulares, quienes también declararon que velarán por la no discriminación de las mujeres españolas, así puedan gestionar ágilmente el regreso y la repatriación de estas víctimas hacia España
En el caso de Cuba, la iniciativa también protegerá a las españolas nacionalizadas que sean víctimas de la muy denunciada violencia machista de las autoridades policiales, de la seguridad del Estado, militares y de otras dependencias gubernamentales, como ha sido y es el caso de activistas, periodistas y artistas como Iliana Hernández, que está bajo vigilancia constante de agentes de la seguridad del Estado apostados a las afueras de su vivienda, y que le impiden salir a la calle.
Katherine Bisquet, Carolina Barrero, Camila Lobón, Anamelys Ramos, Camila Acosta, Daniela Rojo, Saily González, Luz Escobar, Yanilys Sariego, Berta Soler, y muchas otras mujeres cubanas han sido víctimas de tales procedimientos, que suman humillaciones corporales en centros de detención, y detenciones sorpresivas sin amparo legal alguno.
La plataforma cívica feminista YoSíTeCreo en Cuba denunció precisamente a principios de 2021 el aumento de la violencia machista del Estado y de todo su sistema de instituciones contra familiares, parejas, ex parejas y descendientes de activistas y periodistas independientes, en la total impunidad.
La indiferencia de los tribunales y demás entidades receptoras de estas acciones y la ausencia de una ley cubana contra la violencia de género, aguzan la indefensión de las mujeres implicadas y posibles víctimas.
Punto Violeta integra el espectro de regulaciones urgentes establecidas por el Plan de Mejora y Modernización que impulsan distintos ministerios del Gobierno de España debido las altas alarmas machistas suscitadas en los últimos meses, para buscar un cambio de enfoque en las políticas públicas de atención a las víctimas.
La violencia machista es asumida ahora más claramente como un problema estructural que necesita la implicación de toda la sociedad y sus instituciones, desde la familia hasta la presidencia, para lograr soluciones.
Específicamente esta iniciativa resulta un instrumento contra la violencia machista y extiende masivamente las informaciones necesarias para saber cómo actuar ante un caso de violencia contra las mujeres.
