Mientras las autoridades policiales en Ecuador buscan esclarecer la muerte trágica de una cubana acontecida a miles de kilómetros de la isla, el Tribunal Provincial de Justicia en la provincia de Cienfuegos, ha dictado fuertes condenas para los responsables del asesinato de Yoilén de la Caridad Acosta Torriente, una joven de 18 años cuyo crimen premeditado sacudió a la comunidad local a finales de enero de 2021. Por este hecho, Alnier Chao Navarro ha sido condenado a privación perpetua de libertad, mientras que su esposa, Yarelquis Aguilar Duarte, ha recibido una sentencia de 23 años de cárcel.
El crimen se perpetró con una frialdad alarmante. Chao Navarro, que estaba en libertad condicional por un delito anterior, planeó el asesinato después de un encuentro casual con Acosta Torriente, con quien intercambió números telefónicos.
Según se reveló en el juicio, él la citó bajo el pretexto de un encuentro, la golpeó en la nuca y luego la asfixió. Posteriormente, con la complicidad de su esposa, trasladaron el cuerpo en un saco a un cañaveral cercano y le prendieron fuego, intentando eliminar así cualquier evidencia del brutal asesinato.
Este horrendo acto no solo dejó una familia destrozada sino que también encendió una alarma sobre el aumento de la violencia en la isla; y sobre todo por el modo frío y cruel en que fue ejecutado. También porque, una de las involucradas en el hecho, es una mujer, que ejerció la violencia física contra el cuerpo de una mujer – de apenas 18 años de edad – de su mismo sexo.
Llama la atención que la condena a los implicados llega tres años después del cometido el crimen, y que los detalles del mismo hayan sido publicados en la prensa oficial; medios que, tradicionalmente, no se encargan de cubrir crímenes horrendos como estos.
A pesar de la severidad del castigo, no todos están de acuerdo con lo dictaminado por los jueces.
«Cadena perpetua es poco, como quedó esa familia que nunca se van a recuperar de esta tragedia y por esta blandenguería con las sanciones es que siguen cometiendo tantos asesinatos y violaciones. Con pena de muerte para estos casos, el país se ahorraría de comida, ropa, atención médica y otros servicios que otros necesitan y se lo dan a estos ciudadanos que no se lo merecen. Y cag… en los derechos humanos,» opinó un forista en la publicación de la reseña en el oficialista 5 de Septiembre.
Paralelamente, en un suceso igualmente trágico pero en Ecuador, otra joven cubana fue asesinada en circunstancias brutales.
Identificada preliminarmente como Enelsi Montoya Frías, de 24 años, su cuerpo fue encontrado junto al de otra mujer – de nacionalidad venezolana – en la vía Cuenca – Girón – Pasaje, en el sector de Santa Isabel. Ambas mujeres, que presuntamente trabajaban en el centro nocturno local «Chirimoya», sufrieron impactos de bala en la cabeza.
Sus familiares y amigos ahora piden ayuda a la comunidad para poder repatriar su cuerpo a la isla.
La investigación está en curso y las autoridades ecuatorianas están trabajando para esclarecer los hechos y dar con los responsables de estos crímenes. Según los reportes, antes de su muerte, las mujeres estuvieron acompañadas por un hombre afroamericano, lo que podría ser clave para resolver el caso.
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