Según señala el portal Cibercuba, más de 380 mil solicitudes de parole humanitario para cubanos están pendientes de revisión, lo que ha congestionado el sistema de procesamiento de casos y amenaza la viabilidad del programa migratorio.
Según documentos oficiales del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de Estados Unidos, a los que tuvo acceso CBS, hasta finales de abril se habían recibido más de 1.5 millones de peticiones bajo el programa de parole humanitario para cubanos, venezolanos, nicaragüenses y haitianos.
Los casos pendientes de cubanos son superados únicamente por las solicitudes de haitianos. Esta situación está sobrecargando la capacidad del sistema para procesar las solicitudes y reducir los acumulados desde enero.
El programa enfrenta algunos desafíos debido a la gran cantidad de solicitudes. Por ejemplo, el programa permite hasta 30,000 permisos por mes y requiere que USCIS procese al menos 1,000 archivos diariamente entre las cuatro nacionalidades que se benefician del programa. Sin embargo, actualmente reciben alrededor de 12.000 solicitudes diarias, lo que genera importantes retrasos.
En respuesta a la gran cantidad de solicitudes, el gobierno de EE. UU. implementó recientemente cambios en el proceso de selección de solicitudes de libertad condicional humanitaria, combinando la aprobación aleatoria de casos con la atención de las solicitudes que han estado esperando por más tiempo. La modificación implica procesar aproximadamente 500 solicitudes diarias de forma aleatoria, mientras que otras 500 serán elegidas en función del orden en que fueron registradas.
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A abril de 2023, las cifras proporcionadas por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) indican que más de 128.000 personas han recibido autorización para viajar a Estados Unidos como beneficiarios del programa parole, de las cuales unas 102.000 han podido ingresar al país. . De estos, los cubanos han recibido más de 24.000 aprobaciones de viaje y alrededor de 22.000 han podido ingresar con libertad condicional.
También es importante tener en cuenta que el futuro de estos programas de libertad condicional es incierto. Un tribunal federal de Texas escuchará un caso presentado por 20 estados republicanos que buscan poner fin al programa de libertad condicional. El juicio está programado para comenzar el 15 de junio y se espera que dure dos semanas. No se espera un fallo hasta al menos el 1 de septiembre.
