El pugilista cubano Andy Cruz, debutó en el boxeo profesional en Estados Unidos, con una victoria ante el mexicano Juan Carlos Burgos y conquistó un título internacional de peso ligero de la Federación Internacional de Boxeo.
Cruz se impuso por decisión unánime 100-90, 100-90 y 98-92, en un combate pactado a 10 rounds, concebido como el evento co-estelar de la cartelera que se desarrolló en el Masonic Temple de Detroit, en Michigan.
Desde temprano en el combate, el peleador mexicano se vio obligado a defenderse de un agresivo ataque corporal de Cruz, quien salió al encerado con una alta dosis de humildad, pero confiado en sus capacidades.
De esta manera, el oro olímpico en Tokio-2020 y tres veces campeón mundial amateur, supo llevar los compases de la pelea como su hubiera fungido al máximo nivel toda su vida, donde lo único que faltó fue el nocaut.
Con esta victoria, el matancero, de 27 años de edad, evidenció un coeficiente intelectual increíblemente alto en el ring, ya que redujo a un veterano de 45 peleas que ha aspirado en dos ocasiones al título mundial.
Cabe destacar que Burgos, de 35 años, y con registro ahora de 35 victorias, 3 empates y 8 derrotas -ninguna de ellas por nocáut-, nunca ha sido enviado a la lona por ninguno de los rivales de alto nivel que había enfrentado con anterioridad.
Por su parte, Eddie Hearn, el promotor que consiguió el codiciado fichaje de Andy Cruz, dijo que no esperaba que su nueva figura noqueara al aguerrido mexicano.
«Creo que lo más impresionante es su agresividad durante todo el combate (…) Fueron 10 sólidos asaltos, aún queda trabajo por hacer, pero esta noche ha empezado muy bien», declaró satisfecho Hearn a la cadena DAZN.
Cruz había sido expulsado un año atrás del deporte cubano luego de ser sorprendido por las autoridades cuando trataba de emigrar de manera ilegal.
Unos meses antes, el púgil fue excluido del equipo cubano que, luego de más de 60 años, volvía a competir en el boxeo profesional, en una competencia en la ciudad mexicana de Aguascalientes.
Rolando Acebal, emblemático preparador del equipo cubano, justificó en ese entonces la ausencia de su figura de la composición, por «una merma en su rendimiento y actitud en el gimnasio».
Cruz logró abandonar la isla el pasado noviembre, y desde Estados Unidos, el púgil declaró que se marchó «legalmente» y estaba listo para «hacer grandes cosas en este boxeo profesional».
