El fallecimiento del cubano José Antonio Ferrer Acanda, de 63 años, y residente en La Habana, aumenta a 46 el número de víctimas mortales de la explosión del Hotel Saratoga sucedida el pasado viernes 6 de mayo sobre las 10:51 de la mañana.
Según el parte oficial emitido por el Ministerio de Salud Pública de Cuba (MINSAP), el paciente estaba reportado de estado crítico y se hallaba ingresado en el Hospital Calixto García junto a otros 4 heridos.
Hoy 13 de mayo, Cuba amaneció con las banderas izadas a media asta por el Duelo Oficial de una jornada decretado ayer por el mandatario Miguel Díaz-Canel Bermúdez como conclusión de las tareas ininterrumpidas de rescate acometidas por los bomberos y rescatistas cubanos hasta ayer, y permanecen hospitalizados 13 pacientes, de los que 4 son menores de edad, y 9 adultos.
De los menores (3 del sexo femenino y 1 del masculino), que se encuentran en el Hospital Pediátrico Juan Manuel Márquez, 2 permanecen reportados en estado crítico, 1 grave y 1 de cuidado. Los adultos son 6 hombres y 3 mujeres, de los cuales 3 están reportados de críticos, 1 de grave y 5 de cuidado.
Estas 9 personas están ingresadas en el Calixto García (4), el Clínico Quirúrgico Hermanos Ameijeiras (2), en el Instituto de Naurología y Neurocirugía (2) y el turista español afectado permanece en la Clínica Internacional Cira García.
40 pacientes de los 99 heridos, ya recibieron las respectivas altas médicas, luego que evolucionaran positivamente tras sus traumas, y se encuentran en sus hogares con sus familiares.
Luego del hallazgo ayer del último cuerpo entre las ruinas del Saratoga, correspondiente a Shady Cristrina Cobas Mesa, camarera del Hotel, el MINSAP se comprometió a continuar informando sobre el estado y la evolución de todos los pacientes afectados por la explosión, lamentándose hoy el nuevo deceso de Ferrer Acanda.
La tragedia ha sido y es lamentada por los cubanos que han manifestado su dolor con veladas, manifestaciones en las redes sociales, y con la suspensión de numerosas actividades festivas, aunque el Duelo Oficial no lo requiera, a diferencia del Duelo Nacional que sí lo estipula.