El FBI arrestó a dos agentes de la ley de Florida por su participación en drogas ilegales, dijo esta mañana WSVN.
James Darrell Hickox, sargento de la Oficina del Sheriff del Condado de Nassau y Joshua Earrey, un miembro de la Patrulla de Carreteras de Florida, fueron arrestados por separado la semana pasada.
Hickox está acusado de posesión con la intención de vender drogas ilegalmente, mientras que Earrey está acusado de usar drogas ilegales mientras poseía un arma de fuego. Los dos oficiales habían trabajado juntos anteriormente en un grupo de trabajo de la Administración de Control de Drogas.
Hickox, un veterano de 17 años de la Oficina del Sheriff del Condado de Nassau, fue asignado al grupo de trabajo de la DEA de 2014 a 2022.
Una declaración jurada del FBI muestra que vendía drogas de manera rutinaria, incluida cocaína, éxtasis y una sustancia que contiene fentanilo.
La declaración jurada también establece que Hickox y otros a menudo robaban dinero y drogas de los sospechosos y se quedaban con el dinero y vendían las drogas. Se encontraron grandes cantidades de ambos en la casa de Hickox.
El FBI dice que Earrey, un veterano de la patrulla de carreteras de 22 años, ha sido adicto a la oxicodona desde 2021 y había estado comprando drogas a un informante confidencial.
El FBI también dice que Earrey obtuvo 43 recetas legales de oxicodona, hidrocodona y una forma de morfina. Ambos oficiales han sido despedidos por sus agencias.
Existe, en la historia de la Florida, algunos casos notables de agentes de la ley en el estado que han sido condenados por corrupción relacionada con drogas en el pasado.
Por ejemplo, en 2012, varios agentes del Departamento de Policía de Miami fueron acusados de corrupción y tráfico de drogas después de una investigación encubierta del FBI. Uno de los oficiales, Jeffery Graves, fue sentenciado a 90 años de prisión por tráfico de cocaína y armas de fuego.
En 2014, un detective del Departamento de Policía de Miami fue condenado por conspiración para distribuir cocaína y heroína después de aceptar sobornos de traficantes de drogas a cambio de información privilegiada. Él fue sentenciado a 10 años de prisión.
En 2016, un detective del Departamento de Policía de Plantation fue acusado de aceptar sobornos de traficantes de drogas a cambio de protección policial. Fue declarado culpable de conspiración para cometer extorsión y condenado a 25 años de prisión.
En 2019, dos detectives de la oficina del alguacil del condado de Brevard fueron acusados de corrupción y conspiración para cometer tráfico de drogas después de robar drogas confiscadas de la propiedad de un sospechoso y venderlas a un informante encubierto. Ambos fueron sentenciados a prisión.
En 2020, un oficial de la policía de Opa-locka fue acusado de conspiración para distribuir cocaína y heroína después de aceptar sobornos de traficantes de drogas. Fue condenado a 10 años de prisión.
Estos son solo algunos ejemplos de casos de corrupción relacionados con drogas en Florida en los que los oficiales de la ley han sido condenados en el pasado.
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