Autoridades del Acuario Nacional de Cuba desmintieron la información sobre la fuga de un delfín en sus instalaciones. “Por las condiciones que presentan las piscinas del acuario es imposible que alguno de nuestros siete delfines hembra puedan escapar al mar abierto”, precisó a Cuballama Noticias una funcionaria del centro en llamada telefónica.
La aclaración fue hecha luego de que circularan imágenes en redes sociales que evidenciaban la presunta fuga de un delfín en un acuario del país, presuntamente en Varadero, mientras varias trataban de impedirlo. “En caso de que alguno de los nuestros consiguiera traspasar las barreras de las piscinas en las que viven, entonces irían a parar de inmediato en el diente de perro costero y moriría”, ratificó la trabajadora, quien además reiteró que si algún delfín pudo escapar, entonces fue en otro lugar del país.
“El Acuario Nacional de Cuba tiene a sus siete ejemplares en perfecto estado, saludables y prestando funciones”, precisó la especialista. Justamente esta semana se reanudaron los espectáculos con delfines, debido a que las piscinas saladas presentaban un mal funcionamiento en la entrada del agua.
Ese show es el que más público atrae, sobre todo a los niños debido al alto valor sentimental que logran provocar los mamíferos acuáticos. La mujer remarcó que los siete delfines eran hembras y relativamente jóvenes, pero acotó que a pesar de la ausencia de un macho, las condiciones para lograr la reproducción en las instalaciones habaneras no eran las más adecuadas para las exigencias de la especie.
A lo largo y ancho de la geografía cubana permanecen activos varios acuarios, aunque los delfinarios más famosos resultan precisamente el de La Habana, el de Varadero y algunos de los que se encuentran, por ejemplo, en Cayo Santamaría. Sin embargo, muchos usuarios en redes sociales refieren que el Acuario Nacional de Cuba, la principal institución de su tipo en el país no cumple con las normas elementales para mantener a sus animales bajo regímenes de entrenamiento y posterior exhibición a través de shows como los que protagonizan delfines y lobos marinos.
En el caso de estos últimos animales, se hizo muy conocido hace unos meses el fallecimiento de Jocker, un veterano lobo marino que se hallaba en pésimas condiciones de salud y visiblemente desnutrido debido a la falta de una alimentación correcta y requerida por su especie. La noticia disparó por entonces las alarmas de los ambientalistas en el país, quienes exigieron el cierre total de la institución por ausencia de condiciones elementales para la supervivencia de sus animales.
No obstante, las miradas estatales han hecho a un lado y el Acuario continúa prestando servicios, a pesar de las precariedades con que les toca sobrevivir a sus animales.
La funcionaria contactada concluyó que por el momento todo se mantenía tranquilo y sin novedades en el acuario y que seguirían recibiendo al público en los espectáculos marinos hasta tanto alguna irregularidad técnica lograra impedirlo.
