Una perturbación que se formó en el mar Caribe, muy cerca del lugar donde se gestó lo que fue el inicio de la tormenta tropical Alex, permanece aún desorganizada, y por suerte, parece haber definido ya su movimiento hacia el Pacífico.
Es decir: que independientemente de haber surgido en esa zona, la depresión, denominada por ahora Invest 93L, no subirá al norte noroeste como hizo luego Alex, y no afectará con lluvias ni a Cuba ni a la Florida, sino que atravesará Centroamérica (si la atraviesa) y morirá en el Océano Pacífico.
Tampoco, se ha desarrollado y organizado. Su centro ahora se encuentra directamente tierra adentro, en Nicaragua, se desplaza sobre el suroeste del Caribe y debido a esto el Centro de Huracanes ha reducido sus probabilidades de desarrollo a corto plazo a solo un 10 por ciento.
El sistema girará en sentido contrario a las agujas del reloj, hacia el norte el jueves y el viernes y luego hacia el oeste este fin de semana, llevándolo cerca o sobre el sur del Golfo y la Bahía de Campeche para este fin de semana, para finalmente terminar en el Pacífico.
Si la baja presión logra regresar sobre el agua en la Bahía de Campeche, existe una pequeña posibilidad de que se organice brevemente, pero las probabilidades son cada vez más improbables, ya que es probable que el 93L sea absorbido por una perturbación organizativa en el lado del Pacífico.
Sin dudas se trata de una excelente noticia. Según reportes desde la isla, desde el pasado martes se estaban lanzando alarmas muy tempranas debido al surgimiento de Invest 93L donde mismo surgió Alex, y con ello la posibilidad de que más lluvias afectasen a una isla que se vio muy afectada con las lluvias de la tormenta tropical. La única que, por ahora, en esta recién comenzada temporada de huracanes, ha tocado a Cuba y a la Florida.
