Violencia y suicidios. Una Cuba irreconocible para muchos

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Varios hechos reportados a través de las redes sociales enlutaron – enlutan – a decenas de familiares y amigos de víctimas que, en la mayoría de los casos, dejaron no a decenas, sino a cientos de personas consternadas.

Aunque no murió de forma violenta, la muerte de un joven identificado como «Leo» en la publicación hecha por la internauta Yanet Cruz, dejó mensajes de despedida y dolor tras la noticia, como muestra del dolor incontenible de todos los que le conocieron en su natal Contramaestre, provincia de Santiago de Cuba.

Yaet escribió que el cielo se vistió de luto por la partida el 30 de septiembre de un gran amigo, un hermano, alguien que dejó un vacío inmenso pero también recuerdos de risas, llantos y energía positiva. Marian Díaz, Yanela Reyes, Marlenis López y decenas más se unieron al duelo con condolencias y lágrimas, por la muerte del joven. La confirmación de que se había ahogado sacudió aún más a los cercanos. Entre palabras de aliento y tristeza, todos coincidieron en un mismo deseo: que Dios lo reciba y que descanse en paz.

Maikol Tumbarell escribió con el corazón desgarrado por la pérdida de su amigo Roger, recordando las travesuras del barrio y la complicidad de la juventud.

«No sé por qué lo decidiste así, pero sabes que siempre te llevaré en mi corazón», dijo, dejando claro que su muerte fue autoinfligida; hecho que fue corroborado debajo, por algunos de sus amigos más cercanos.

Muchos respondían con el breve pero contundente “EPD”, y entre el duelo, surgió también el desahogo de Yaquelin Calderón, que confesó su amor y la culpa que le atribuían. En los comentarios, viejos vecinos recordaron a la familia de Roger, conectando memorias del barrio. Cada palabra coincidía en lo mismo: se fue demasiado joven, y lo extrañarán siempre. La causa de porqué tomó tan drástica decisión de acabar con su vida no fue revelada, pero quizás lo que más importa es el alto número de suicidios que está teniendo lugar en una lista sumida en una crisis multisectorial, sin que el Estado lo mencione siquiera en sus informes.

De igual manera murió Angelo, por su propia voluntad, dejando un vacío profundo entre amigos, familiares y colegas.

La noticia se esparció con incredulidad: unos hablaban de su humildad, de su condición de buen padre y de persona intachable, mientras otros recordaban su voz en las peñas, interpretando a Nelson Ned con una serenidad que hoy duele evocar. Los mensajes de despedida se repetían con la misma palabra: EPD, vuela alto, campeón. Al confirmarse que se había quitado la vida, la conmoción fue mayor. Desde Cuba hasta Chile, muchos lo despidieron entre lágrimas y recuerdos, jurando mantener viva su memoria en el corazón.

Por la mano de otro se apagó la vida de Franquisquito, u muchacho querido y recordado por la participación en las comparsas de su pueblo, a quien todos recuerdan por su alegría y cercanía.

La noticia estremeció a sus amigos: no fue la enfermedad ni el azar, sino un robo violento lo que lo arrancó de los suyos. Los comentarios se llenaron de incredulidad y rabia, entre quienes no podían creer que lo hubieran matado y quienes solo atinaban a escribir “EPD”.

Mientras vecinos y conocidos recordaron cómo se entregaba a su gente y al barrio, la tristeza se mezcló con la indignación por una pérdida injusta.

Por la mano de otro también fue arrancada la vida de un joven en Corralillo identificado como «Roger».

Nioreportando un crimen informó que lo habrían velado en la funeraria de Corralillo, tras haber permanecido en terapia intensiva durante un tiempo no precisado, como consecuencia de las heridas sufridas tras un asalto. En su publicación, Nio pidió justicia y la captura de los responsables, señalando la violencia que golpea a los barrios.

Los comentarios de sus seguidores expresaban dolor, impotencia y reclamos de castigo ejemplar. Muchos lamentaron que sucesos así no aparezcan en los medios oficiales y denunciaron la desprotección ciudadana en Cuba, mientras otros recordaban que Roger apenas era un muchacho con toda la vida por delante y exigían que su muerte no quedara impune.

Lesther Del Río, quien lo habría conocido recientemente, publicaba un video en el que se ve a Roger bailando, no se sabe cuándo, y lo despedía con palabras cargadas de dolor: “aunque nos conocimos el día 15 de junio…, te quiero mucho, nunca irte, nunca olvidarnos de ti”.

El crimen estremeció al barrio entero y las redes se llenaron de luto y exigencias de justicia.

Por la violencia cayó Michel, un joven que había sido apuñalado en Florida, Camagüey, y que tras varios días hospitalizado finalmente murió. Según reportó Nioreportandouncrimen, el agresor sería Yoandri Cabrera, hijo de Ulises alias “El Moro”, aún prófugo.

A juzgar por una publicación vista en redes, la familia carga con un dolor repetido, pues en ella recuerdan que ya antes un hermano suyo, conocido como Pupito, también había muerto por una puñalada. Esta vez la víctima deja a un hijo de seis años y una viuda. Entre comentarios de indignación, se repite el reclamo de justicia, cárcel o incluso pena de muerte, y el clamor de que no quede impune.

Otro presunto asesinato del que aun no se ha dicho nada es al que se hace referencia en el muro de Pablo Enrique Borrero Brito.

Su publicación se convirtió en un río de mensajes de luto tras el asesinato de un joven al que todos llamaban “el Bote”, y que presuntamente era oriundo de Santiago de Cuba, a juzgar por quien publica y quienes dentro de la publicación se lamentaban muy cercanamente sobre la muerte del joven.

Yankier Infante Bisset, un residente en Santiago de Cuba, según su perfil de Facebook, expresó en los comentarios de la publicación de Borrero Brito:

«Mi cuñi coñoooo no lo creo eso es mentira coño no lo creo y tu hermano el yanki tan poco coño» haciendo referencia tal vez a un hermano de este muerto recientemente, o un gran amigo. Y cerraba su lamento con una pregunta que presume confirmar fue asesinado: «¿Quien fue ese cobarde coño?».

«Pero que cosa más grande,un muchacho tan bueno el se llevaba muy bien conmigo, lo recuerdo cuando pescaba conmigo quien lo mató el que lo hizo que no salga más de la carcel y si es de Dos Palmas un castigo mayor merece,» comentaba por su parte Rafael Cedeño, aportando un dato relevante: el de la localidad donde presuntamente ocurrieron los hechos o de dónde era oriundo «Bote». Según el listado de amigos de Cedeño, el finado podría ser un joven nombrado Yurislan Guibert, y aunque en ocasiones amigos de los fallecidos usan como foto de perfil una del amigo muerto, este no parece ser el caso.

Según el perfil de Facebook de Yurislan Guibert, este es oriundo de Santiago de Cuba, pero reside en Ciudad de La Habana. ¿Ocurrió el hecho en La Habana? Es un detalle a precisar. Su perfil de Facebook dice que era «Director de Hospital en Salud Pública» y que habría estudiado en la Facultad de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Esto quedaría pendiente a ser confirmado también.

Amigos y familiares no salían del asombro: “estuvimos juntos todo el día gozando y Dios te separó de mí muy pronto”, escribió uno de sus compañeros, incapaz de asimilar la noticia. Otros recordaban sus días de pesca, sus bromas de barrio y la nobleza que lo caracterizaba.

“Un paisano mató a un paisano”, lamentó alguien, resumiendo la tragedia de una violencia que no perdona ni a los más jóvenes. Otro debajo decía

EPD, repetían todos.

pd: Cuballama Noticias se encuentra verificando un presunto feminicidio ocurrido en la barriada de «Los Motores», en Vertientes, provincia de Camagüey, a finales del pasado mes de septiembre, día 24, y del que no se ha dicho nada hasta el momento. Los datos que se poseen son muy fragmentados y escasos. Una mujer de 50 años murió a manos de su pareja, o expareja, un varón mucho más joven que ella. Si Ud. conoce algo sobre este caso, por favor contacte con el Observatorio de Alas Tensas aquí

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