Este miércoles 1 de noviembre, un suceso trágico sacudió a la comunidad de Manzanillo, en la provincia de Granma, Cuba. Dos jóvenes, conocidos como Yasiel «El Piry» y Alaisito, ambos menores de 22 años, fallecieron tras ser presuntamente asesinados. La noticia, que se difundió rápidamente a través de las redes sociales, ha dejado un profundo dolor y consternación en la localidad, confirma la ola de violencia que se vive en Cuba en estos momentos.
Según los reportes de usuarios en redes, los muchachos estaban gravemente heridos y fueron ingresados en un hospital, aunque no se detallaron las circunstancias exactas de su hospitalización. Una publicación en redes sociales expresó el dolor colectivo:
“Cuánto dolor y cuanta tristeza solo unos niños hasta cuándo tanta injusticia. Dios mío, tantos criminales acabando con la vida de inocentes. Nuestro Barrio hoy se viste de Luto. EPD Piry y Alainsito”.
La zona de Pueblo Nuevo, donde residían los jóvenes, se encuentra sumida en el luto.
«Se siente en cada esquina la pérdida de Yasiel y Alaisito. EPD los dos muchachos que no llegaban a los 22 años, que apenas su vida comenzaba a dar vuelo a coger buenos caminos», se lamentó un internauta, quien también extendió sus condolencias a los padres, familiares y amigos de los fallecidos.
El activista Niover Reyes dijo a través de sendos videos en su cuenta de Instagram que los dos jóvenes fueron asesinados en circunstancias trágicas y en hechos separados en la ciudad de Manzanillo, Cuba.
Sin embargo, curiosamente, reveló el activista, ambos jóvenes vivían uno frente al otro, y aclaró que los crímenes no están conectados y que ocurrieron en contextos completamente distintos.
En el primer asesinato, el del joven nombrado Alain Tai, conocido como «Alaisito», que contaba al morir con solo 19 años de edad, su victimario presuntamente fue otro joven apodado «El Chino», quien se encuentra actualmente prófugo de la justicia.
«Alaisito» fue brutalmente degollado y apuñalado todo indica que para robarle su moto por «El Chino», quien fue identificado como Dainier Estrada Serrano.
Según Reyes, el móvil del crimen fue la envidia, ya que el asesino deseaba poseer la moto de la víctima, aunque lamentó que detrás de la trágica historia de este asesinato, se haya conocido que el presunto asesino es hijo de una educadora y un trabajador, muy humildes ambos pero excelentes personas, queridas en la comunidad. ¿Qué pudo fallar? Se preguntó Reyes con relación a la educación del muchacho, y sugirió que fueron «las malas amistades». Reyes instó a la comunidad a proporcionar cualquier información que pueda llevar a su arresto.
Reyes dijo además que el otro joven, residente en la misma zona, fue asesinado durante la noche en una fiesta, también de una puñalada. Reyes dijo no tener muchos detalles sobre la muerte del segundo. Afirmó desconocer su edad, pero aseguró que las dos familias, vecinas entre sí, están sumidas en el luto.
Reyes destacó que Cuba está experimentando una ola de violencia sin precedentes en la isla. Hizo un llamado a la justicia para que el culpable sea capturado y enfrente las consecuencias de sus actos. Manzanillo, señaló, está de luto no solo por uno, sino por dos jóvenes: Alaisito y El Piry, quienes, en una triste coincidencia, eran amigos y vecinos.
Estos hechos se suman a una serie de crímenes recientes en la isla, reflejando un incremento preocupante en los índices delictivos.
La proliferación de delitos violentos en Cuba se atribuye a las necesidades económicas y al deterioro social, en un contexto donde, para muchos, objetos materiales como teléfonos celulares, motos o carros parecen tener más valor que la vida humana.
La falta de medidas ejemplarizantes por parte de las autoridades también contribuye al aumento de la violencia, dejando a la sociedad en una espiral de inseguridad y miedo.
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