“De los Juegos Olímpicos tengo que irme con una medalla, ya sea oro, plata o bronce”, dijo Jordan Díaz en una reciente entrevista
Jordan Díaz, atleta cubano nacionalizado español, está viviendo un 2024 extraordinario.
Recientemente, en Roma, el cubano se coronó campeón de Europa de triple salto con la tercera mejor marca de la historia (18,18 metros), y en La Nucía, Alicante, ganó su segundo título de campeón de España sin oposición. Ahora, con la mirada puesta en los Juegos Olímpicos de París, Díaz tiene un objetivo claro: ganar una medalla, sea de oro, plata o bronce.
Así lo manifestó este joven, nacido en La Habana en el año 2001 en una reciente entrevista publicada en el diario 14ymedio.
En la entrevista se resalta su «deserción» de la delegación cubana en el 2021. Su aprobación para competir por España en 2024; y su debut internacional con «la roja», ganando el oro en el Campeonato Europeo de Roma y superando al también cubano Pedro Pichardo, quien no se marchó muy contento de la competencia.
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A un mes de los Juegos Olímpicos, Díaz se siente preparado aunque reconoce la dificultad de repetir su hazaña de Roma debido al alto nivel competitivo y la presión psicológica del evento. Con su entrenador Iván Pedroso, quien también actúa como su psicólogo y médico, Díaz confía en su preparación técnica aunque reconoce que aún puede mejorar aspectos como su caída.
El grupo de trabajo en Guadalajara, donde entrena, es fundamental para su desarrollo, proporcionando un ambiente tranquilo y propicio para la concentración. Díaz destaca la importancia de mantener un equilibrio, desconectando del atletismo mediante videojuegos y compartiendo momentos con amigos y compañeros de equipo.
Jordan Díaz sueña con los Juegos Olímpicos desde su juventud en Cuba y ve en París la oportunidad de materializar ese sueño. A pesar de las acusaciones de Pedro Pichardo tras su victoria en Roma, Díaz se mantiene enfocado en sus objetivos y no deja que las críticas afecten su rendimiento. Su meta es clara: regresar de París con una medalla.
Díaz ha recibido un gran apoyo de la federación y la selección española, sintiéndose valorado y querido como uno más del equipo. A pesar de la presión, se mantiene tranquilo y concentrado en mejorar sus marcas, viendo en cada competencia una oportunidad para demostrar su trabajo y esfuerzo. Con los Juegos Olímpicos a la vuelta de la esquina, Jordan Díaz se prepara para dejar su huella en el evento más prestigioso del deporte mundial.
